Por Geovanny Zapata
Chetumal.- Usuarios del servicio de taxis en Chetumal lamentan que en estas fechas “que hay dinero” los prestadores del servicio se den el lujo de negar el servicio.
Los ruleteros de Chetumal o de cualquier parte de México están obligados a dar el servicio a los usuarios que así lo requieran, sea cual fuese su destino dentro de la ciudad debido a que cuentan con un tabulador.
Los taxistas no pueden escoger el trayecto de los pasajeros a su conveniencia, ni negar el traslado cuando se trata de más de un usuario que se dirige a algún sitio y mucho menos a personas discapacitadas.
Debido a estos problemas, usuarios de Chetumal se quejan por el pésimo servicio de los ruleteros, quienes en estas fechas, cuando la demanda es alta, hacen las cosas a su conveniencia, haciendo un pésimo trabajo.
María Esther Serrano, usuaria de taxi, dijo que es lamentable que los taxistas no quieran trabajar en Chetumal en una temporada tan importante.
Contó que salió en compañía de su esposo e hija con un bebé de mes y medio de nacido, y por ser tres personas adultas los taxis que pasaban vacíos no paraban.
“Aquí llevamos más de media hora, les hacemos parada y disminuyen su velocidad para estacionarse, pero ven que somos muchos y vuelven a acelerar”.
Comentó que en lo que esperan el servicio más de cinco taxistas les hacen luces o tocan el claxon, pero ven que son varios y no paran. Además, si la distancia es muy retirada dicen que no van por el lugar y te dejan si el transporte.
“Muchas veces los taxistas se detienen, pero te preguntan: ¿A dónde? Y si le das una dirección retirada simplemente te dicen que no van por allá”, expresó.
Nora Leticia, ciudadana de Chetumal, explicó que es malo el servicio porque al subir a una unidad realizan paradas continúas dependiendo si hay más usuarios, aparte de que si van muy lejos no te dan el servicio.
“Es que el problema es que subes a un taxi y a cada rato para, si alguien más se lo solicita, preguntan a dónde y si queda en la ruta llevan al pasaje, uno a veces tiene prisa y es cuando más veces buscan pasaje extra”, indicó.
Durante un recorrido hecho por 24 Horas para verificar si el comportamiento es generalizado, nos encontramos con que, efectivamente, los chafiretes no dan paradas pese a que hayan varias familias en una sola esquina solicitando el traslado.
Fue al menos una decena de taxis los que pasaron vacíos sin siquiera voltear a ver a quien le hacía la parada.
Sin duda este servicio deja mucho que desear en Chetumal, donde ha habido quejas inclusive de personas discapacitadas que por su condición no pueden obtener un vehículo de alquiler en las calles, ya que es más laborioso para el taxista ayudar a subir a la persona.
Lo que si es un hecho es que cuando se ve comprometido su sindicato por la entrada de alguna plataforma digital que promete prestar un mejor servicio, las manifestaciones no se dejan esperar, alegando que ellos cuentan con las unidades y capacitación para un excelente trato a los usuarios.