Por Ricardo Hernández
CANCÚN, Q. Roo.- En el primer mes del año, Quintana Roo encabezó la lista de los estados con la tasa más alta de corrupción de menores mujeres, por cada 100 mil, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Este análisis tiene por objeto poner a disposición de la sociedad los datos estadísticos sobre el tema para conocer la magnitud, tendencia y ubicación geográfica de las conductas y acciones que atentan en contra de este grupo de población.
Detalla el informe que la tasa en enero se fijó en 0.7 afectadas.
Por este tipo de delito por cada 100 mil féminas, la tasa nacional fue de 0.1.
El despliegue de información da cuenta que fueron seis las víctimas de corrupción de menores. Del total, cuatro tenían 17 años y el resto no especificó su edad.
Por ese número de delitos, el estado ocupó la sexta posición. Fue superado por Nuevo León, Ciudad de México, Baja California, Jalisco y Guanajuato.
Entre las entidades que no registraron ninguno de estos delitos figuran: Aguascalientes, Baja California Sur, Guerrero, Morelos, Querétaro, San Luis Potosí, Tlaxcala, Veracruz y Yucatán.
LLAMADAS DE EMERGENCIAS
En el rubro Llamadas de Emergencia Relacionadas con Incidentes de Violencia contra la Mujer, Quintana Roo aparece en el antepenúltimo lugar con un registro de 61,superando solo a Zacatecas y Baja California Sur, quienes tuvieron 53 y 41, respectivamente.
En cuanto a la solicitud de auxilio vía telefónica en casos relacionados con este flagelo, por cada 100 mil féminas, la entidad está en el séptimo peldaño.
En el indicador con el que vuelve a escalar posiciones y se ubica en el Top 10 es en lo correspondiente a las llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de abuso sexual, pues tuvo 16.
En este caso, quienes tuvieron más, fueron Nuevo León, Baja California, Ciudad de México, Chihuahua y Sonora. También ocupa la sexta posición en cuanto a los estados con más solicitudes de emergencia relativas a incidentes violentos de pareja.
El Secretariado Ejecutivo dio cuenta de una tasa de 182.9 llamadas por cada 100 mil habitantes.