Cancún.- El fantasma de los apagones que afectaron el año pasado a la Península, rondarán nuevamente a la región en el Verano, lo que ha generado honda preocupación, manifestó el diputado Luis Alegre Salazar, presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados.
Ya lo sufrimos el verano pasado y me preocupa que no contemos con toda la capacidad instalada. Por eso es importante que, si bien gran parte de los recursos del Derecho de No Inmigrante (DNR) irá al proyecto turístico del Tren Maya, se destine algo para infraestructura, a fin de impulsar el desarrollo en la Península, expresó.
Luego de recordar que gran parte del DNI se destinaba a gasto corriente, para el pago de las oficinas del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) en el extranjero, ahora se canalizarán para inversión, que es lo que le hacía falta a México.
Tenemos que bajar el gasto corriente y aumentar la inversión para ser más competitivos. Eso lo lograremos con cualquier inversión en infraestructura turística, como el Tren Maya, en la planta productiva o para mejorar a la CFE y Pemex, a fin de alcanzar la autosuficiencia energética.
En entrevista para el noticiero matutino de Radio Turquesa, Alegre Salazar recordó que en días pasados sostuvo una reunión con la Asociación de Secretarios de Turismo de la República (Asetur), que agrupa a 32 secretarios de Turismo del país, y cuyo presidente es Jorge Enrique Manos, secretario de Turismo de Campeche.
Hablamos del CPTM, que está en liquidación y constituía un gasto oneroso para los mexicanos, pues si bien se fondeaba con la recaudación del DNI que pagan los turistas internacionales, los mexicanos no tuvimos beneficios porque se gastó de manera ineficiente. Sus 23 oficinas en el extranjero nos costaban 63 millones de dólares anuales en gasto operativo, no en promoción, añadió.
Vamos a aprovechar que hay más de 140 oficinas de Relaciones Exteriores en el mundo, que tienen un agregado comercial, quien desempeña la función de “inteligencia de mercado”, como hacían los integrantes del CPTM, subrayó.
La decisión está tomada, y si bien el 30% del DNI se destinaba a la promoción, el otro 70 por ciento era derrama no eficaz, no eficiente y no del interés de los mexicanos. Un ejemplo es la Fórmula 1, un excelente producto para atraer turismo internacional, principalmente de Centro y Sudamérica a la Ciudad de México, pero implicó el gasto de 42 millones de dólares anuales durante cinco años, es decir, costó 210 millones de dólares.
Sin embargo, los autos y pilotos están tapizados de marcas, de modo que es un producto totalmente patrocinable, que no requiere el pago de más de 200 millones para traerlo a México. Este gobierno plantea hacer más con menos y de manera más transparente, aseveró.
Apuntó que en la reunión con la Asetur se anunció una modificación a la Ley de Coordinación Fiscal, luego de que la Comisión de Turismo presentó una iniciativa para destinar parte de los recursos del Ramo 23 para fondear el Ramo 33, mediante el cual se canalizan recursos para infraestructura en los Estados.
El 23 es el famoso “ramo de los moches” de los diputados, que nos convertían en un “minigobierno” al disponer de una bolsa para apoyar la realización de proyectos en los estados o distritos. Eso se eliminó porque era un nido de corrupción entre los diputados y quienes trabajaban con ellos y la mayor parte del dinero se destinó al Ramo 33.
El Ramo 33 se iba a utilizar para promover el turismo y los pueblos mágicos y no se ha estado ejerciendo de esa forma, de modo que presentamos una iniciativa para que parte de ese dinero se destine a ese fin y a infraestructura.
Con información de INFOQROO