Por Geovanny Zapata
Chetumal.- Ante el notable problema ecológico en la sabana de Chetumal, El Colegio de la Frontera del Sur (Ecosur) realizó un estudio de impacto ambiental, mismo que fue entregado a la Procuraduría del Medio Ambiente para su análisis y determinación.
Nuria Torrescano Valle, coordinadora de la Unidad Chetumal, lamentó que por falta de financiamiento e inversión no se haya podido realizar más análisis en la sabana de Chetumal, que está en riesgo por la presencia de la especie Pistia stratiotes, comúnmente conocida como lechuguilla.
Dijo que las instituciones pertenecientes al Gobierno estatal deben destinar los recursos necesarios para poder brindar un informe preciso sobre la situación actual, pues podría desaparecer este ecosistema.
Explicó que Ecosur realizó un diagnóstico preliminar de la sabana, en el que se tuvo la presencia de metales pesados y zonas contaminadas, pero precisó que se requiere de dinero para seguir investigando al respecto.
Destacó que como tal, la lechuguilla no representa problema, y a pesar de que especialistas en el tema han informado que la presencia de esta planta es ajena al sitio, por lo que altera el equilibrio natural y se presenta la sobrepoblación.
Al abordar el tema de la contaminación dijo que existen vertederos de agua negras de las poblaciones aledañas, así como basura que se arroja clandestinamente al interior.
Consideró que ante este panorama se tendría que hacer un manejo tanto de la lechuguilla como de las aguas negras. Por lo que se tendría que realizar una restauración integral en sedimentos, agua y plantas.
Recalcó que la lechuguilla no representa problemas para el ecosistema, más que nada es un indicador de que el agua de la sabana tiene grandes cantidades de nutrientes idóneas para esta planta.
Consideró que la reparación podría llevar años pues, aunque se han emprendido acciones para el control de la plaga, los resultados han sido hasta el momento poco favorables