Por Eugenio Pacheco
CHETUMAL, Q. Roo.- Desde inicios de mayo hasta finales de junio, al interior de los planteles de nivel básico los comités escolares, integrados por maestros y padres de familia, mantienen los procedimientos de licitación para concesionar las cooperativas o tienditas.
Por primera ocasión, los padres de familia tendrán una amplia participación en estos procesos, que les servirá para buscar que los concesionarios garanticen para cada escuela, que los alimentos y productos que se sirvan y vendan a los alumnos sean sanos, higiénicos y a precios accesibles.
Además, buscan vigilar que los recursos que ingresen por la renta de los espacios de cooperativas escolares y la concesión de la tiendita, se utilicen de manera legal y vayan dirigidos estrictamente al mejoramiento y mantenimiento de los centros de enseñanza, como se marca en la norma.
Héctor Santín Gómez, representante de la Asociación de Padres de Familia en el estado, dijo que son más mil 200 escuelas las que cuentan con venta de alimentos y que en este proceso los padres y las direcciones podrán decidir si renuevan a los concesionarios o brindan oportunidad a nuevos interesados.
Cada escuela establecerá un calendario para la realización de la licitación, es decir la convocatoria, la entrega de propuestas y documentación de los interesados, los cuales deberán ser revisados y avalados por las autoridades de la Secretaría de Educación de la entidad.
Todos los procesos deben finalizar antes del 30 de junio. Explico que, en el presente ciclo escolar, se han registrado incidencias menores relacionadas con la calidad, cantidad y precio de los alimentos; sin embargo, se han solucionado luego de conminar a los concesionarios a apegarse al reglamento y a lo ofrecido por ellos mismos cuando se les otorgó la oportunidad.
Además, la Comisión Federal contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) realiza recorridos constantes a las tiendas escolares y las incidencias han sido también poco significativas, y también han sido solventadas.
Respecto a los recursos que se captan a través de esos permisos, dijo que se trata de un tema que aun deja mucho que desear, sobre todo por la opacidad con la que se maneja el dinero, al no existir una norma o reglamento que obligue a los directores de los planteles a informar periódicamente sobre cómo se invierte.
Actualmente los concesionarios pagan a los directores a razón de un peso por cada alumno de nivel básico, lo que en primaria representa hasta 300 pesos diarios por plantel de primaria y hasta mil 500 pesos al día por cada secundaria.
Es decir, se recaudan siete mil 500 pesos a las semana y trescientos mil pesos en los doscientos días del ciclo escolar, por cada una de éstas.
Son mil quinientos pesos semanales y sesenta mil por todos los días del ciclo escolar en cada primaria que cuenta con tienda escolar.
El representante de los paterfamilias, aseguró que hasta el año pasado muy pocos directores transparentaron el uso del dinero.
Durante el ciclo escolar 20162017 las autoridades de la Secretaría de educación y la Asociación de Padres de Familia en Quintana Roo conocieron y documentaron cinco casos de mal uso y desvío de recursos provenientes de las aportaciones voluntarias y las tiendas escolares, que debió servir para dar mantenimiento a escuelas.