Por Eugenio Pacheco
CHETUMAL, Q. Roo.- La información que se adjudica a la NASA y que circula por redes sociales, respecto a la posibilidad de que en los siguientes años pueda subir cinco metros el nivel del mar y desaparezcan diversas ciudades en la península de Yucatán no es descabellada, consideró el coordinador de Protección Civil en Quintana Roo, Adrián Martínez Ortega.

Dijo que, si bien no existe un estudio para confirmarlo, tampoco se puede descartar, pues el deshielo en los polos y el aumento en el nivel del mar son efectos del cambio climático generado por la afectación a los sistemas ambientales.

Martínez Ortega dijo que ningún organismo internacional dedicado a estudiar el comportamiento climático ha negado la posibilidad de este escenario catastrófico.

Aclaró que la información, si bien se maneja en distintos medios, a través de las redes sociales, tampoco ha sido confirmada o desmentida por alguna autoridad o representante de la NASA, por lo que no puede considerarse oficial.

Lo que sí es verídico, es que en meses anteriores El Colegio de la Frontera Sur, a través de uno de sus investigadores, aseguró que el sistema lagunar que rodea la ciudad de Chetumal es susceptible de provocar una inundación de varios meses, en casos de lluvias muy fuertes por huracanes y escurrimientos de las zonas montañosas.

Aseguró que las autoridades de Quintana Roo, en coordinación con el Gobierno federal, trabajan para puntualizar esta información proporcionada por el investigador Juan Carlos Alcerreca, quien dio a conocer que desde hace varios meses mantienen un monitoreo físico e hidrológico del caudal del Rio Hondo, que arrojó como primeros resultados la posibilidad de una inundación en Chetumal, por estar rodeada de la bahía y de al menos otros cinco cuerpos de agua importantes.

Se advirtió que la interconexión, en algunos casos subterránea, de la Bahía de Chetumal, el Rio Hondo, laguna de Bacalar, y otros lagos como Guerrero, Chile Verde, Agua Salada, Raudales y Arroyo negro son de alto riego para la capital.

En los escenarios que se han planteado, dijo el entrevistado, está la posibilidad alta de que un huracán categoría tres o mayor, con lluvias intensas, o los escurrimientos al Rio Hondo desde Chiapas y Guatemala, puedan inundar por meses la capital de Quintana Roo.

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