Facebook informó este lunes que encontró una red de operación para influir en las elecciones estadounidenses de 2020 que al parecer está vinculada con la agencia rusa de desinformación Internet Research Agency, de acuerdo con el diario inglés The Guardian.
Además, la compañía descubrió otras tres redes vinculadas a Irán.
La red social dijo que las había cerrado como parte de un esfuerzo continuo por contrarrestar “campañas de influencia extranjera”.
Facebook dijo que el “comportamiento inauténtico coordinado” apuntaba a Estados Unidos, áfrica del Norte y América Latina e incluía “un trabajo proactivo antes de las elecciones estadounidenses”. La compañía dijo que había compartido los hallazgos con “agentes de la ley y socios de la industria”.
En una publicación de blog el lunes, la compañía también reveló algunos ajustes a sus políticas destinadas a combatir la influencia y manipulación extranjera. Facebook ahora identificará publicaciones de medios controlados por el Estado, proporcionará más información sobre el país de origen de las páginas de Facebook y ayudará a asegurar aún más las páginas de Facebook de los candidatos políticos.
Tras preguntas sobre su capacidad para identificar y luchar contra la desinformación e influir en las campañas en sus plataformas durante la campaña de 2016, la compañía de redes sociales ha sido el foco de atención antes de las elecciones presidenciales de 2020 en EU.
Facebook ha hecho todo lo posible para decir a votantes y legisladores que se está tomando la desinformación más en serio, algo que también hizo antes de las elecciones de medio término en EU en 2018.
Pero la compañía ya ha recibido duras críticas, particularmente en torno a la publicidad política. La política de Facebook es que no verificará las publicaciones de los políticos, incluidos los anuncios, lo que ha generado quejas de candidatos demócratas como Elizabeth Warren y Joe Biden.
El director ejecutivo de la red social, Mark Zuckerberg, dijo la semana pasada que no cree que el rol de Facebook sea tomar decisiones sobre publicaciones de políticos.
“No creo que la mayoría de la gente quiera vivir en un mundo donde solo se pueden publicar cosas que las compañías tecnológicas consideran 100% verdaderas”, dijo el jueves durante un discurso en la Universidad de Georgetown.
“La gente debería poder conocer de primera mano lo que dicen los políticos”.
Con información de Reforma