El paso del cometa “Halley” por el sistema solar generó un importante conocimiento sobre el comportamiento de esos cuerpos celestes, sobre todo porque dejó a su paso una de las lluvias de estrellas conocidas como Oriónidas, que se convirtió en una de las más populares por su fácil observación.
Los cometas son los cuerpos celestes constituidos por hielo, polvo y rocas que orbitan alrededor del Sol siguiendo diferentes trayectorias y junto con los asteroides, planetas y satélites, forman parte del sistema solar.
El cometa “Halley”, es un cometa muy grande y brillante que orbita alrededor del Sol cada 75 años en promedio, aunque su período orbital puede oscilar entre 74 y 79 años, según lo explicó a Notimex el astrónomo Eddie Salazar Gamboa.
Se le conoce con ese nombre en memoria de astrónomo inglés Edmond Halley, quien fue quien descubrió el período orbital del cometa en el año de 1705, sin embargo, ya existen crónicas sobre el paso de cometas por el sistema solar desde el año 250 Antes de Cristo (A.C.).
Se cree que muchas de esas crónicas hacen referencia al “Halley”, aunque eso no podía corroborarse porque no se sabía cuánto duraba el periodo orbital de ese objeto, pero ahora ya se sabe gracias a su descubridor, comentó Salazar Gamboa.
En el año de 1986, el paso del “Halley” fue difundido ampliamente por todos los medios de comunicación de todo el mundo, recordó el también académico, pues se podría observar con tecnología que no existía antes y registrar su paso desde la tierra.
“Sin duda fue un hecho histórico para la ciencia y el conocimiento”, dijo.
En el año 2006, los astrónomos dieron con una nube o “lluvia” de meteoros y estrellas fugaces provenientes de la cola del cometa “Halley” de una densidad superior a la habitual conocida ahora como la lluvia de Oriónidas.
“Esto nos ha permitido conocer mucho sobre los cometas y como interactúan con el sistema solar, es un cometa al que quizá solo se le vea una vez en una vida humana, pero que por los menos un par de veces al año se observan sus efectos de retroalimentación que tienen sobre las constelaciones de estrellas que están al alcance de nuestros telescopios”, precisó.
Sería hasta el año 2061, cuando podría observarse de nuevo el paso del cometa “Halley” desde la tierra, “y seguramente será un acontecimiento al que se le dará mucha atención por parte de las sociedades astronómicas y científicas”, dijo Salazar Gamboa.
El especialista recordó que el próximo día 24 de octubre, a las 23:00 horas, será uno de los momentos idóneos para observar esa lluvia de estrellas que registra la caída de un meteoro cada dos minutos. El fenómeno se extenderá este año hasta el próximo 7 de noviembre.
“Es importante apuntar la visión hacia la constelación de Orión, e ir a observar la lluvia de estrellas en lugares oscuros, lejos de las zonas urbanas”, puntualizó.
Con información de 24 Horas México