Los líderes de los Estados Unidos y Japón acordaron seguir colaborando para lidiar con Corea del Norte debido al incremento de la política de provocación por parte de Pyonyang.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, y el presidente estadounidense, Donald Trump, hablaron por teléfono durante casi 90 minutos la noche de este sábado. La conversación tuvo lugar a petición de Trump, destacó la cadena de noticias NHK.
Los líderes analizaron las recientes amenazas de Corea del Norte y coordinaron planes para hacer frente al país.
Pyonyang ha realizando actos de provocación antes de la fecha de fin de año que ha establecido para que los Estados Unidos hagan concesiones con el fin de que las conversaciones sobre la desnuclearización puedan tener lugar.
Abe criticó las peligrosas provocaciones de Corea del Norte y dijo a Trump que apoya el proceso iniciado por los Estados Unidos sobre la desnuclearización Pyongyang.
Estados Unidos y Corea del Norte sostuvieron sus últimos diálogos a nivel de trabajo en Estocolmo, Suecia, a principios de octubre, pero la reunión terminó sin progreso, con Pyongyang acusando a Washington de no presentar una nueva propuesta.
Corea del Norte dio a Estados Unidos hasta final del año para presentar una nueva propuesta que pueda acabar con el estancamiento en sus conversaciones nucleares, diciendo que, de lo contrario, se vería obligada a renunciar a las negociaciones y elegir un “nuevo camino”.
Pyongyang ha insinuado que puede levantar su moratoria sobre las pruebas de misiles balísticos intercontinentales y nucleares, a menos que Estados Unidos cumpla con la fecha límite establecida por el líder norcoreano, Kim Jong-un.
Corea del Norte realizó por última vez una prueba nuclear en septiembre de 2017 y una prueba de misiles balísticos intercontinentales (ICBM) en diciembre del mismo año, aunque recientemente realizó una serie de lanzamientos de proyectiles y misiles balísticos de corto alcance.
Las conversaciones nucleares se han estancado desde que la cumbre entre Kim y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fracasó en febrero, debido a la brecha entre ambos sobre la forma de combinar los pasos de desnuclearización de Pyongyang con el alivio de las sanciones y otras concesiones de Washington.