Fernando Martí Brito, cronista de la ciudad, ha propuesto este fin de semana grabar en el muro de honor del Congreso de Quintana Roo el nombre del ideólogo de Cancún: Antonio Enríquez Savignac.
Enríquez Savignac fue el responsable, a finales de la década de los 60 de planificar, coordinar los trabajos y asegurarse de la concreción de la fundación de lo que sería una nueva ciudad en México construida desde cero: Cancún.
Por ello, con motivo de los primeros 50 años de vida de esta ciudad, a cumplirse el próximo 20 de abril, la Sociedad "Andrés Quintana Roo", presidida por Fernando Martí, propuso tal acto conmemorativo y la presentó en rueda de prensa este fin de semana desde el ayuntamiento de Benito Juárez.
Esta agrupación forma parte de la Sociedad Mexicana de Estadística y Geografía. Sus integrantes sostienen que las gestiones del entonces funcionario atrajeron al destino las primeras inversiones privadas, determinó la fisionomía del área turística y estableció los criterios para impedir la especulación y el saqueo.
"Durante su gestión como secretario de Turismo del Gobierno federal (1982-1988) se concretaron inversiones que lograron triplicar la capacidad de la zona hotelera de Cancún, pasando de seis mil a 19 mil cuartos", afirmó Martí Brito.
Para conseguir la inscripción del personaje en el lado derecho del muro de honor del Palacio Legislativo, es necesario que los diputados locales aprueben la iniciativa de decreto. Luego se tendría que presentar la acción en una sesión solemne.
El cronista comentó que será esta semana cuando entablen conversaciones con los legisladores para avanzar en la propuesta.
HISTORIA
Al filo de los 60, Enríquez Savignac se integró a la triada que promovió la fundación de Cancún, conformada por Antonio Ortiz Mena, secretario de Hacienda; Rodrigo Gómez y Ernesto Fernández Hurtado, director general y subdirector del Banco de México, respectivamente.
Para entonces, rememora Fernando Martí en su libro Cancún: fantasía de banqueros, el Banco de México buscaba atraer divisas del extranjero, dado que el país padecía un cada vez más creciente déficit comercial.
Es por ello que Rodrigo Gómez emprendió la tarea de desarrollar el turismo en el país. Para ello, tendrían que elaborarse estudios, trabajos de campo y, naturalmente, elegir un responsable de ello.
"La elección recayó en un joven banquero de 35 años con un posgrado en Harvard llamado Antonio Enríquez Savignac", escribe Martí. "Fernández Hurtado le confería una tarea envidiable: viajar a los principales centros turísticos del país y del extranjero, por cuenta del Gobierno, a fin de elaborar un diagnóstico de la actividad y explorar las posibilidades de México en tal terreno".
Enriquez Savignac concluyó que valía la pena incursionar al país en la actividad terciaria, de turismo, y que existía una lengua de tierra en un área selvática y frente al Mar Caribe donde se podía desarrollar un Centro Integralmente Planeado: Cancún, que este año cumple medio siglo de vida, de éxitos en materia hotelera y de grandes retos sociales.
Por Ricardo Hernández