De acuerdo con testigos que vieron al Alcalde en la plataforma de abordaje acompañado de su esposa, Sandra Berlanga, salió el pasado martes 4 cerca de las 14:00 horas del Aeropuerto del Norte en un avión de su hermano Filiberto de la Garza, un Hawker 800 modelo 1985, con un costo aproximado de un millón de dólares, según sitios especializados.
La bitácora de vuelo indica que el avión aterrizó a las 14:16 horas locales en el Aeropuerto Internacional de El Paso, Texas, para pasar aduana. Después partió de nuevo para llegar a las 15:27 horas (17:27 horas de Monterrey) al Aeropuerto Henderson Executive de Las Vegas.
Una hora después, el avión regresó a Monterrey presuntamente sólo con Filiberto de la Garza.
Al ser cuestionado vía WhatsApp un día después de su salida, De la Garza -señalado como aspirante a la Gubernatura de Nuevo León- negó primero su viaje, luego lo admitió pero dijo que iba solo y después aseguró que el mismo martes había regresado a Monterrey.
Al ser descubierto De la Garza aceleró su viaje de regreso, y solicitó de madrugada un avión particular, cuyo servicio debió costar unos 30 mil dólares, casi 600 mil pesos.
“Es un viaje de motivos personales. Me tomé un par de días”, afirmó ayer al ser cuestionado después de un evento.
“Obviamente el viaje no tenía nada qué ver con la Administración. Es un tema personal”.
¿Fueron vacaciones?, se le preguntó.
“Fueron, sí, vamos a decirlo, de alguna forma, vacaciones, pero no propiamente para divertirse, sino fue un tema personal” .
El miércoles, contactado por la noche, el Alcalde negó que hubiera ido a Las Vegas y aseguró que estaba en Monterrey.
Sin embargo, al señalársele que se tenía información de la bitácora, admitió que subió al avión, pero dijo que regresó ese mismo día, sin comprobarlo.
Cuestionado ayer sobre sus contradicciones, el priista se limitó a reconocer que viajó de martes a jueves, sin dar más explicaciones.
“Yo ya tenía pensado el regreso”, dijo, “iba a estar aquí a la mitad del día.
“Entonces, como era un tema personal, yo le comenté eso a la persona (de Grupo REFORMA), pero al final de cuentas aquí estamos en Monterrey. Estamos trabajando”, argumentó.
Al preguntársele sobre el costo del jet privado en el que regresó, aseguró que ese vuelo no tuvo costo, sino que aprovechó una “relación personal”.
“No tiene costo”, afirmó.
“Realmente aprovechamos algunas, pues bueno, ustedes saben, la relación personal, para poder hacer este viaje personal”.
¿También era de su hermano (ese avión)?, se le insistió.
“Mire, me voy a reservar esa información, pero le puedo asegurar que no tuvo un costo personal para mí”, dijo.
Cuando se le informó que como funcionario público no debe recibir regalos de terceros, aseguró que no fue un regalo. “Se aprovechó algunas relaciones”, insistió
Con información de Reforma