Japón bajo estado de emergencia tras repunte de casos de Covid-19, así lo decretó el Primer Ministro Shinzo Abed, la alerta sanitaria busca atajar el repunte reciente de la pandemia de coronavirus y que afectará especialmente a los centros educativos y a los lugares de ocio, buscando no afectar demasiado a la poderosa maquinaria productiva del país.
El Primer Ministro hace la declaración tras un repunte de los casos nuevos en Tokio, incluidos aumentos consecutivos de más de 100 pacientes durante el fin de semana.
Para el lunes había mil 116 casos confirmados en la región metropolitana de 14 millones de personas. En todo el país, Japón tiene tres mil 906 casos confirmados, además de los 712 de un crucero que estuvo en cuarentena en el puerto de Yokohama, cerca de Tokio. Se han reportado 91 muertes.
Recibe diario las noticias en tu WhatsApp dando click AQUÍ
El Primer Ministro indicó que no habría cuarentenas rígidas como en Europa. El estado de emergencia solo permitirá a la Gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, y a los responsables de otras seis regiones incluidas tomar más medidas para reforzar las peticiones de distanciamiento social. Casi todas esas medidas serán recomendaciones sin sanciones para los infractores.
“No hay tiempo que perder (…). Hay riesgos de una grave amenaza para la vida de la gente”, afirmó, Shinzo Abe, en una rueda de prensa para explicar la decisión adoptada hoy.
Es la primera vez en la historia reciente del país que se aplica esta medida, conocida en Japón como estado de emergencia, para hacer frente a una situación que, en principio, tiene unas dimensiones que están muy lejos de las de otros países afectados por la COVID-19, como España, Italia, Estados Unidos o donde brotó la pandemia, China.
También te puede interesar: Coronavirus: Ley de estado de emergencia es aprobada en Japón
Japón bajo estado de emergencia; reporta tres mil 906 casos confirmados y 19 decesos
Como parte de las medidas hay una petición de que la gente se quede en casa, recomendaciones para las escuelas sobre cierres temporales y peticiones de que negocios y tiendas no esenciales cierren o aplacen exposiciones y actos públicos.
Se establece que los infractores no serán sancionados a menos que incumplan órdenes sobre proporcionar o almacenar artículos de emergencia como mascarillas quirúrgicas y material médico.
Aunque la declaración podría limitar de forma significativa la circulación de gente que entra y sale de la capital. Takahide Kiuchi, economista del Nomura Research Institute, dijo en un informe reciente que el estado de emergencia haría caer el gasto del consumidor en casi 2.5 billones de yenes (23 mil millones de dólares), lo que supondría un descenso del 0.4 por ciento en el Producto Interno Bruto de Japón.
Con información de Sin Embargo