Noviembre es el mes naranja de lucha contra la violencia de género, un tipo de violencia que afecta a una de cada tres mujeres; 15 millones de jóvenes de todo el mundo han sufrido el sexo forzado.
Una de las violaciones de los derechos humanos más devastadoras del mundo actual es la violencia en contra de mujeres y niñas.
A rasgos generales, la ONU indica que la violencia se manifiesta de forma física, sexual y psicológica, las cuales incluyen:
ÔÇó Violencia por un compañero sentimental (violencia física, maltrato psicológico, violación conyugal, feminicidio)
ÔÇó Violencia sexual y acoso (violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero, acoso cibernético.
ÔÇó Trata de seres humanos (esclavitud, explotación sexual)
ÔÇó Mutilación genital
ÔÇó Matrimonio infantil
Actualmente, la violencia contra la mujer sigue existiendo en todos los países siendo un obstáculo para alcanzar la igualdad, el desarrollo, la paz y el respecto a sus derechos humanos, convirtiéndose en un problema estructural.
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Noviembre, mes naranja para dar visibilidad a la violencia de género
En este contexto, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, un movimiento iniciado en 1981 para dar visibilidad a esta problemática social y denunciar la violencia que se ejerce día a día sobre las mujeres en todo el mundo, con el fin de lograr su erradicación.
De acuerdo con datos del gobierno federal, se eligió al naranja porque “este es un color que representa el futuro brillante y optimista libre de violencia contra las mujeres y niñas”.
Con información de la ONU