CANC├ÖN, QROO.- Quintana Roo inicia este lunes una semana más en color naranja en el Semáforo Epidemiológico Estatal, en la que percibe un riesgo inminente de ir hacia el color rojo por el alto índice de contagios por Covid-19.
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El pasado fin de semana se vivió como si no pasara nada, con actividades que ponen a la entidad en peligro de regresar a confinamiento.
CIERRE DE NEGOCIOS
Esto implicará el cierre de negocios, la pérdida de empleo, la limitación de la movilidad y frenar la apertura gradual, ordenada y responsable de la recuperación económica.
Por ejemplo, en Rancho Viejo, Benito Juárez, continuaron las fiestas religiosas con afluencia de más de 300 asistentes, sin las medidas preventivas ni los protocolos correspondientes.
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En los demás municipios, las campañas electorales para diputados federales y presidentes municipales están en las calles, con recorrido y caminatas con alto número de personas, en donde la única ausente en Susana Distancia, poniendo en riesgo la salud.
En Playa Norte, en Isla Mujeres, se pudo observar el arribo de más de 300 embarcaciones, entre lanchas y yates, con familias a bordo que festejaron el sábado como si fueran inmunes al covid-19.
LATENTE REGRESO AL ROJO
Estas actividades sin control y con total irresponsabilidad tienen a la entidad al borde de regresar al color rojo en el semáforo epidemiológico y con posibilidades de perder lo que se ha avanzado en la reactivación económica.
Las autoridades estatales han iniciado acciones de inspección y toman medidas que incomodan y son criticadas.
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Sin embargo no queda más remedio que dar paso este lunes al cierre de avenidas y calles por las noches para bajar la movilidad.
Se procederá a la supervisión de aforos en apego al semáforo epidemiológico y ante la inmadurez e insensatez de muchos ciudadanos será el Gobierno del Estado el que asuma una vez más el mando para frenar la mala conducta.