La pandemia por Covid-19 provocó que las familias mexicanas modificaran los patrones de consumo en sus hogares, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Según el estudio del Inegi, el gasto en salud registró un aumento de 40.5%, al pasar de 901 a mil 266 pesos entre 2018 y 2020.
Detalló que este incremento se debió a la atención médica privada, provocada por los contagios de Covid-19.
En el decil I de ingreso (el más pobre), el gasto en salud se elevó a 85 pesos, mientras que en el decil X (el más rico) fue de 4 mil 775 pesos, de acuerdo con el instituto.
Informó que en los intermedios V y VI, el gasto se ubicó en mil 340 y mil 496 pesos, respectivamente.
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Además, esto provocó que se disminuyera la inversión en educación y esparcimiento.
El Inegi señaló que, del gasto total en los hogares para cuidado de la salud, 25.4% correspondió a fármacos recetados; 23.7%, a servicios médicos; 19.1%, a atención hospitalaria, sin incluir parto; y 12.1%, a material de curación.
Sin embargo, en 2018, los tres primeros lugares en gasto corriente correspondían a educación, con 2 mil 947 pesos; alimentos fuera del hogar, con 2 mil 759 pesos, y combustibles para vehículos, con 2 mil 148.
Para 2020 fueron carne, con 2 mil 243 pesos; cuidados personales, con mil 816 pesos, y educación, con mil 789.
El sector salud público reportó 8.5 millones de usuarios menos con respecto a 2018. En promedio, 57.5% se atendió en el sistema privado y 25% buscó atención en unidades de la Secretaría de Salud, siendo la población con menores ingresos.
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Yuselim Reyes