Una de cada 10 personas que viven en Cancún sufren males como el estrés, depresión e insomnio, debido a la contaminación acústica o el ruido excesivo, lo que ha hecho que este destino turístico sea una de las ciudades más ruidosas; se reciben más de 18 quejas al día en el 911.
Las quejas que se reciben en el número de emergencias por la contaminación acústica o el ruido excesivo, en su mayoría son conciliadas; es decir que se prioriza solo llamar la atención a quienes lo generan, ya que es difícil comprobar la falta para generar las multas.
Según el INEGI, el UMA (Unidad de Medida y Actualización) para el 2022 se definió en un monto diario de 96.22 pesos mexicanos, por lo que aproximadamente se tendría que pagar entre 962.22 a 2 mil 886.6 pesos de multa en caso de cometer este tipo de falta.
Las carpinterías, talleres mecánicos, templos religiosos, restaurantes, bares, tortillerías y salones de fiestas son los comercios que más quejas registran por rebasar el límite permitido de sonido.
Algunas faltas al orden público que se sancionan con 10 a 30 veces el valor por día de la UMA son usar aparatos de sonido como bocinas o instrumentos que produzcan ruido a un nivel que moleste a los vecinos o en la vía pública, producir o causar ruidos que por cualquier medio evidentemente afecte la tranquilidad de las personas, efectuar fiestas recurrentes que afecten la tranquilidad de los vecinos. Perturbar el orden público y escandalizar en la vía pública.
Un estudio de MexData revela que Cancún es una de las ciudades del país con mayor porcentaje de población afectada por el ruido que producen los automóviles, mascotas, fiestas, bares, música y hasta discusiones familiares.
El informe detalla que mientras que en ciudades como Puebla y Nuevo León solo el 34% sufre por una exposición mayor a los 65 decibelios, límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud, en Cancún el 72% y en Playa del Carmen el 68% viven todos los días con niveles superiores.
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