La Antigua Jericó, considerada la ciudad más antigua del mundo y ubicada en Palestina, ha sido inscrita como Patrimonio Mundial de la Humanidad por el comité de la Unesco durante su convención anual celebrada en Riad.
La decisión de inscribir este sitio se tomó rápidamente y sin objeciones por parte del comité de 21 miembros.
Esta inscripción se suma a los tres lugares que Palestina ya tiene en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, que incluyen la Iglesia de la Natividad y la ruta de peregrinación en Belén.
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La Antigua Jericó, también conocida como Tel es Sultán, es considerada la ciudad más antigua y la más baja del mundo, ubicada en un oasis verde en el valle del Jordán, cerca del río Jordán, el Mar Muerto y Jerusalén.
Con una historia que abarca unos 10.000 años, esta ciudad ha dejado evidencias de su desarrollo humano en sus 23 capas arqueológicas, que incluyen sistemas de fortificación, viviendas, arquitectura pública y rastros del culto neolítico a los antepasados.
La Antigua Jericó representa un hito fundamental en la historia de la humanidad al ser la ciudad fortificada más antigua del mundo que ha estado continuamente habitada.
La ciudad más antigua del mundo, Antigua Jericó, se suma al Patrimonio de la Humanidad
Además, es un testimonio de la aparición de una de las primeras sociedades basadas en la domesticación de plantas y animales durante la Revolución Neolítica.
Esta inscripción es un reconocimiento a la importancia histórica y cultural de la Antigua Jericó y se suma a la lista de sitios de Patrimonio Mundial de la Humanidad protegidos por la Unesco en todo el mundo.
El comité de la Unesco continúa examinando otras candidaturas para su posible inscripción como patrimonio de la humanidad en su convención anual.
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