Luego de la exhibición de imágenes sobre un derrame de cemento en el área de manglar por obras del Puente Lagunar Nichupté, la SICT transmitió que “no se trata de negar un hecho, pero son situaciones 100% mitigables”.
También, dio a conocer que “el hecho no ocurrió en la zona lagunar y que el cemento derramado es un residuo de manejo especial no contaminante, que ya fue retirado; “el lugar está otra vez limpio”.
Por su parte, Aracely Domínguez Rodríguez, presidenta del Grupo Ecologista del Mayab (Gema), aseguró que es cemento el material derramado en la laguna, empleado para rellenar los pilotes para el puente lagunar que se construye, y no materia orgánica.
Esta declaración surge luego de que la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (SICT) enviara una tarjeta informativa, en la que habló sólo de sedimento lagunar.
Cabe recordar que la información de la SICT señaló que este sedimento “es producto o materia orgánica en descomposición y no ‘sustancia tóxica’”.
Afectaciones
Aracely Domínguez Rodríguez dijo que la materia orgánica que se remueve del fondo lagunar con la construcción de los pilares genera turbidez.
Con ello, los pastos marinos pueden quedar sepultados, lo que afecta la fauna marina, ya que es fuente de alimentación para varias especies, expresó.
Explicó que la remoción de la materia orgánica genera eutrofización, lo que da como resultado la pérdida de oxígeno que daña la calidad de las aguas, por un lado.
Por otro, ese mismo sedimento tiene en su composición la acumulación de más de 40 años de las descargas residuales de drenajes clandestinos y del mal funcionamiento de las plantas de tratamiento tanto de Fonatur como de la ciudad, que sí llevan sustancias tóxicas, incluyendo metales pesados, así como los lixiviados del antiguo basurero de Cancún donde hoy día tenemos al Parque Cancún, lugar que colinda con el Malecón Tajamar, subrayó.
“Sabemos que como medida de mitigación se les pidió el uso de mallas antidispersión que han dejado mucho que desear, ya que ha habido constantes derrames de sedimento, trabajando con alta ineficiencia”.
Aracely Domínguez Rodríguez, Gema.
Remueven contaminantes en la laguna
Estudios de calidad de agua realizados por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidos (Conanp) en la Laguna Nichupté en 2019, mostraron presencia de cadmio.
Este es un metal altamente tóxico, que las autoridades ambientales relacionaron con la presencia de embarcaciones hundidas y trabajos de reparación dentro del cuerpo de agua.
En el documento presentado en el Sexto Simposio Internacional Recorecos 2019, denominado: “Nutrientes y metales pesados en la Laguna Nichupté, Quintana Roo: Una retrospectiva”, se afirma una concentración de amonio y nitrito; el hierro fue el metal más prevalente y con mayor concentración.
“Se sobrepasan los límites de fosfatos, cadmio y plomo sugeridos para la protección de vida acuática en Tajamar y la Laguna Nichupté”.
“En conclusión, el área donde se está perforando, sí tiene sedimentos con contaminantes”, aseveró.
Se puede limpiar
Al respecto, el activista Guillermo D’Christy, comentó: “Soy consultor en tratamiento de agua y desde esa perspectiva se puede limpiar.
“Hay que evaluar el volumen y la condición del concreto. Si ya fraguó o se disolvió la mezcla con el agua de la laguna, posiblemente con un aspirado y si está solidificado, romper, pero habría que hacer una evaluación, esto lo deberían responder los responsables”, indicó.
“Puente, un mal necesario”: Náuticos
Por su parte, Francisco Fernández Millán, presidente de la Asociación de Náuticos de Quintana Roo, opinó:
“El puente es un mal necesario, será un oxígeno impresionante para la viabilidad de los trabajadores en la zona hotelera; se pone en una balanza para lo que está contaminando ahora la laguna, creo que está parejo”,
“Por inconciencia de los restauranteros, hoteleros que se les hizo fácil sacar los drenajes a la laguna y al mar, después de 30 años estamos sufriendo las consecuencias”,
Añadió que “prestamos servicios dentro de la laguna y todos queremos que la contaminación sea menor, aunque siempre va a haber afectación, es imposible que no la haya, pero que el impacto sea el menor posible”.