El Museo Submarino de Arte (MUSA), ubicado entre Cancún, Punta Nizuc e Isla Mujeres, se prepara para expandir su colección bajo el agua.
Roberto Díaz Abraham, director del MUSA, anunció que más de 60 piezas están listas para ser hundidas, con la posibilidad de que Punta Sam sea el escenario elegido para su colocación.
Nuevas esculturas para la vida marina
Díaz Abraham explicó que el MUSA continúa siendo un éxito, no solo como atracción turística, sino también como un refugio para la vida marina.
“Es protección y alimento para peces juveniles, y las piezas se han llenado de vida”.
Vivianne Solís, oceanógrafa, ha demostrado que las esculturas no introducen elementos dañinos al mar, sino que reproducen el mismo ecosistema de los arrecifes naturales, comentó.
Entre las nuevas piezas destaca la instalación Los guerreros de coral, diseñada por el propio director, la cual representa corales muertos que “regresarán” al mar para “resucitar”.
¿Te enteraste?
Impacto de fenómenos naturales en las esculturas del MUSA
A pesar del paso de recientes huracanes por la costa del norte del Caribe Mexicano, las obras del MUSA han permanecido en su mayoría intactas.
Sólo una pieza en Punta Nizuc se ladeó debido a un error en la orientación de su base, pero el problema ya fue corregido y la escultura fue asegurada.
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El MUSA en cifras
El museo cuenta actualmente con tres “salones” subacuáticos, distribuidos en las áreas de Manchones, Nizuc y Punta Sam, y alberga un total de 516 esculturas.
La zona de Manchones es la más popular entre los visitantes, con un promedio diario de 50 buzos y 300 snorkels, la mayoría de ellos provenientes de Norteamérica.