El sector náutico de Quintana Roo enfrenta una escasez de tripulación calificada, por lo que busca la contratación de extranjeros para cubrir el déficit ante la cercanía de la temporada alta decembrina.
Esta situación ya ha sido dada a conocer a la Dirección de Marina Mercante en el estado, por lo que esperan una pronta respuesta ante un cierre de año que se vislumbra favorable.
Así lo dio a conocer Ricardo Muleiro López, director de la Asociación de Náuticos de Quintana Roo (ANQR), quien subrayó la falta de personal capacitado para cumplir con los requisitos oficiales.
Déficit de tripulación para embarcaciones mayores
En la Capitanía Regional de Quintana Roo, ubicada en Puerto Juárez, se registran cerca de 4,800 embarcaciones.
Sin embargo, el principal desafío está en la tripulación para manejar embarcaciones mayores de más de 100 pies de eslora.
Muleiro López destacó que, aunque este tipo de naves representan una minoría, tienen una carencia del 10% de personal calificado.
Lo anterior, ha llevado a la exploración de la posibilidad de contratar tripulaciones extranjeras.
“La Secretaría de Marina aún no nos ha dado una respuesta clara sobre la viabilidad de contratar personal extranjero, pero estamos en conversaciones y esperamos tener una respuesta por escrito pronto”, comentó Muleiro.
Temporada alta y necesidad de respuesta
Con la llegada de la temporada invernal, un periodo crucial para el turismo en la entidad, se espera que la demanda aumente significativamente, por lo que el sector náutico urge una pronta solución.
“El crecimiento de la oferta en actividades náuticas ha superado la disponibilidad de empleos para cubrir esas vacantes”, insistió el director de la ANQR.
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Causas y efectos
La falta de instituciones educativas especializadas en Quintana Roo ha complicado la formación de tripulación local, mientras que la llegada de personal calificado de otros puertos, como Veracruz, ha sido limitada.
Muleiro López explicó que muchos de los capitanes que actualmente operan han adquirido experiencia con el tiempo, pero la rápida expansión del sector ha creado una brecha que afecta las operaciones.
Dijo que actualmente el sector opera al 45% de su capacidad y, comparado con 2023, este año presenta un descenso del 26% en las expectativas de operación.
Además de los huracanes y los días de puerto cerrado, la baja ocupación hotelera durante el verano ha contribuido a un cierre de año por debajo de lo logrado el año anterior, concluyó.