La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco) expresó su preocupación por los efectos negativos del nuevo impuesto a cruceristas que entrará en vigor en México.
Esta medida, que elimina una exención previa, afectará significativamente la competitividad de los destinos turísticos del país, particularmente en zonas costeras como Cozumel.
Controversial impuesto a cruceristas
De acuerdo con Eduardo Morales, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) de Cozumel, la nueva disposición obligará a cada pasajero de crucero a pagar 860.56 pesos (aproximadamente 42 dólares) al arribar a los puertos mexicanos.
Antes, los pasajeros que permanecían solo unas horas en estos destinos estaban exentos de este cargo.
“Esta decisión desincentiva la llegada de cruceros y afecta a más de 33 mil negocios en Quintana Roo, así como a otras comunidades portuarias en el país”, explicó Morales.
El impacto del nuevo impuesto a cruceristas no solo se verá reflejado en la disminución del flujo turístico, sino también en los ingresos de pequeños negocios.
Asimismo, en la economía de transportistas, guías de turistas, restaurantes y otros prestadores de servicios que dependen de esta actividad.
Según el empresario, se estima que cada visitante genera un consumo promedio de 100 dólares durante su estancia en México.
Protestas contra nuevo impuesto a cruceristas
En respuesta a esta medida, más de 350 locatarios y vendedores locales salieron a las calles para exigir la eliminación del impuesto.
Por su parte, las cámaras empresariales han mostrado su respaldo a estas movilizaciones.
Señalan que el nuevo gravamen pone en riesgo los ingresos de miles de familias que dependen del turismo de cruceros.
Datos de la Dirección General de Puertos revelan que más de 7 millones de pasajeros llegaron a México vía crucero entre enero y septiembre de 2024.
Este flujo masivo de visitantes es crucial para la economía de regiones como Quintana Roo y otros estados con puertos receptores.
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Llamado al Gobierno federal
El presidente de Concanaco, Octavio de la Torre, subrayó el compromiso del organismo para apoyar a los comerciantes y empresarios afectados en todos los puertos del país.
Además, confía en que el gobierno federal tomará una decisión que proteja a las comunidades portuarias y a las familias que dependen del turismo.
“Es fundamental garantizar la sostenibilidad de este sector clave para la economía mexicana, sin comprometer su competitividad internacional”, añadió De la Torre.
Este impuesto no solo afecta a las economías locales, sino que también podría alterar la percepción de México como un destino amigable para los cruceros, algo que podría tener consecuencias a largo plazo.