La medicina tradicional maya es un legado cultural que combina sabiduría ancestral y recursos naturales para el cuidado de la salud.
Hace dos décadas, en la comunidad de San Ángel, municipio de Lázaro Cárdenas, un grupo de 35 mujeres inició un proyecto que transformaría sus vidas y su comunidad.
Este viaje comenzó con un taller impartido por el Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), donde aprendieron a elaborar productos medicinales utilizando ingredientes autóctonos.
Fue así como nació Maya Dzak, una agrupación cuyo nombre significa "medicina maya".
Un sueño que creció con esfuerzo
María Enelda Baas Caamal, actual presidenta de Maya Dzak, recuerda que en los primeros años no contaban con un lugar fijo para trabajar, lo que las llevó a realizar sus actividades en casas particulares o en el comedor comunitario.
Ante esta situación, decidieron adquirir un terreno propio, marcando un hito importante para la organización y su crecimiento.
En sus inicios, las integrantes elaboraban productos como el té de chaya, reconocido por sus propiedades para la limpieza de los riñones.
Este té, aún muy demandado, ha ayudado a muchas personas a evitar costosas intervenciones quirúrgicas.
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Apoyo y capacitación
Con el respaldo del antropólogo Alejandro Soberanis, Maya Dzak logró organizarse y obtener recursos como un destilador y herramientas de producción.
Además, recibieron capacitaciones de la Secretaría de Desarrollo Social y de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), lo que permitió la construcción de una palapa y un laboratorio.
Aunque el laboratorio aún requiere algunos acabados, ya se utiliza para la elaboración de sus productos medicinales.
Organizaciones internacionales, como la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ), también han contribuido al fortalecimiento del emprendimiento mediante capacitaciones y estrategias para mejorar la comercialización de sus productos, apoyando así la conservación de la biodiversidad y el uso sostenible de los recursos naturales.
Formalización y expansión
Gracias al apoyo de un contador, Maya Dzak logró constituirse como una cooperativa registrada ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Esto les permitió registrar su marca oficialmente y abrir nuevos mercados. Actualmente, ofrecen una amplia gama de productos, entre ellos:
- Ungüentos tipo Vaporub
- Jabones y shampoos con miel y romero
- Pomadas para dolores musculares
- Bloqueadores solares y repelentes
- Tés medicinales y cápsulas para la diabetes
Medicina tradicional maya, legado de trabajo comunitario
Hoy en día, Maya Dzak comercializa sus productos en la isla de Holbox y en tianguis eco-turísticos, además de colaborar con agencias de viajes que han mostrado interés en sus productos.
La agrupación cuenta actualmente con cuatro integrantes activas: Rita María Tuz Poot, Ayda María Baas Caamal, María Rosalba Tuz Euan y María Piedad Tuz Ramírez.
La historia de Maya Dzak es un testimonio de perseverancia, empoderamiento femenino y preservación de la medicina tradicional maya.
Este esfuerzo colectivo ha generado oportunidades económicas para la comunidad, contribuyendo al desarrollo sostenible y al rescate de conocimientos ancestrales.