Cozumel está de fiesta por el regreso de una especie de flamenco.
Todos en la isla de Cozumel se encuentran felices con el retorno de su distinguido visitante. Credit: Especial

El flamenco caribeño (Phoenicopterus ruber) identificado como DXZZ ha regresado a la Reserva Ecológica Estatal Laguna Colombia en Punta Sur, Cozumel.

Asimismo, este ejemplar, ausente desde 2022, confirma la calidad del ecosistema y su papel clave en la ruta migratoria de la especie.

En un comunicado se informó que la Fundación de Parques y Museos de Cozumel (FPMC), a cargo del parque, celebra este avistamiento, que refuerza la importancia de la conservación de los humedales y la biodiversidad en la isla.

Cozumel: Un visitante habitual regresa a casa

El flamenco DXZZ fue anillado hace 25 años por el proyecto FlamencoLab de la Fundación Pedro y Elena A.C. en la Península de Yucatán.

Además, desde el año 2000 ha sido registrado en Punta Sur y ahora, tras dos años, regresa acompañado de un grupo de hasta 30 ejemplares, reafirmando la laguna como un sitio clave de descanso y alimentación.

Monitoreo y conservación: claves del equilibrio ecológico

Asimismo, desde hace más de dos décadas, la FPMC mantiene un programa de observación y registro de flamencos en los complejos lagunares.

Estos esfuerzos han permitido evaluar la salud del ecosistema y garantizar su conservación.

También, la directora general de la FPMC, Juanita Alonso Marrufo, destacó que estos avistamientos reflejan el éxito de las estrategias ambientales impulsadas en Quintana Roo.

El legado de “Rube” y su impacto en la biodiversidad

Jesús Benavides Andrade, director de Punta Sur, informó que el avistamiento de DXZZ fue registrado por el biólogo Héctor González Cortés, quien propuso el apodo “Rube” en honor a Rubén Ademar Méndez Martín, guía especializado en turismo de naturaleza y gran impulsor del monitoreo de flamencos.

El regreso de “Rube” y otros flamencos es una señal positiva de que los ecosistemas de Punta Sur siguen siendo un refugio seguro para la biodiversidad.

Finalmente, la FPMC continuará con sus estrategias de preservación para garantizar que estas majestuosas aves sigan eligiendo Cozumel como su hogar.

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