A pregunta obligada en la Mañanera del Pueblo del lunes 10 de marzo, la presidenta Claudia Sheinbaum fue breve y directa: “Estaban distraídos, es todo”, justificó una vez más, ante el desaire que se hizo viral y amenazó con quitarle reflectores a la mega concentración del Zócalo de la Ciudad de México.

Los años de "gracia" al nepotismo

Estaba muy fresco el otro “desaire” más reciente a la Presidenta desde el Congreso, cuando los intereses de las tribus internas se impusieron a la iniciativa presidencial y se dieron ellos mismos tres años de gracia al nepotismo para poder ejercerlo “por última vez” en 2027 en las gubernaturas de San Luis Potosí, Zacatecas y Guerrero, además de presidencias municipales y diputaciones federales y locales.

En este contexto, el tema se hizo viral y seguirá siendo tema obligado en las próximas semanas. Los eventos políticos y éste en particular por su gran dimensión, son generadores de señales, en el simbolismo del sistema político mexicano y está plenamente justificado su abordaje por parte de la comentocracia de toda tendencia. 

Banquete opositor

La oposición ha aprovechado el tema, también de manera justificada; inevitable dejar pasar esta expresión de lenguaje corporal colectivo del grupo de élite de la 4T, nada más y nada menos que los dos líderes de la Cámara de Senadores, Adán Augusto López Hernández y de Diputados, Ricardo Monreal Ávila y el autor de la oposición a la iniciativa contra el nepotismo, el niño verde Manuel Velasco Coello.

Los tres, apenas disfrutando su poder cash, ejercido contra la iniciativa de la Presidenta, al haber pospuesto el año de vigencia del 2027 a 2030 y darle tres años de gracia al nepotismo del que ellos y sus familias son directos beneficiarios.

Hasta parecía que la selfie era la celebración de su reciente triunfo, al haber doblegado la iniciativa presidencial, anteponiendo sus intereses a la unidad que deberían fomentar y no dinamitar.

Una vez más la Presidenta sale en defensa de quienes la desairan “para mantener la unidad” y se limitó a justificar: “Estaban distraídos; es todo”.

El rompimiento, ¿cuándo?

Puede ser, pero en política, lo que se ve, es; y el incidente no deja de reflejar la actitud de las tribus internas de la 4T y la defensa de sus intereses personales, de familia y de grupo, rumbo a su pronosticado rompimiento, tan esperado por la oposición; la pregunta no es si va a suceder o no alguna fisura, sino cuándo sucederá.

¿Y por qué sucederá? Porque los políticos “emocionados” están en lo suyo; aunque sea en contra de los principios 4T que dicen representar. La Presidenta marca el rumbo, pero ellos están “distraídos” y a veces se percibe que la dejan sola.

Y no son las únicas tribus que están en lo suyo, ejerciendo el poder grupal para sus intereses, pero bajo la bandera guinda; piensan que el pueblo es tonto y que el bono democrático del obradorismo les alcanzará para su nepotismo en “el año de gracia 2027”. La política sigue su curso y usted tiene la última palabra.

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