Aylan Jesús, un niño que brilla.
Aylan Jesús, con siete años y parálisis cerebral leve, encuentra en el CRIT no solo rehabilitación, sino amor y esperanza. Credit: Especial

Aylan Jesús tiene 7 años y una sonrisa que derrite el alma. Es alegre, platicador y, como él mismo dice, “feliz cuando voy al CRIT”, donde cada consulta médica se transforma en abrazos sinceros y pequeñas aventuras.

Aylan Jesús: Siempre hacia adelante

Asimismo, su historia, marcada por la lucha y la ternura, cobra un nuevo significado este Día del Niño.

Nació con parálisis cerebral leve y retraso global del desarrollo, pero eso no ha sido obstáculo para avanzar con fuerza y esperanza.

Gracias al tratamiento que recibe en el Centro de Rehabilitación e Inclusión Infantil Teletón (CRIT), ha dado pasos enormes en su desarrollo motriz y emocional.

Aylan vive con entusiasmo las visitas médicas, aunque impliquen ejercicios exigentes y evaluaciones constantes.

“Este martes hubo fiesta por el Día del Niño, me gané dulces y un camión, jugué mucho, me gusta ir”, cuenta con una mezcla de orgullo e inocencia.

Aficionado al fútbol

Le encanta el fútbol, los globos de agua y las fiestas escolares; pero este año, su celebración del Día del Niño es distinta: es la primera sin su mamá, quien falleció el año pasado tras una larga batalla por recuperar su salud luego de una cirugía que cambió su vida debido a una presunta negligencia médica.

“Mi mamá nos llevaba a pasear con mi hermana Yuritzy y nos divertíamos mucho”, recuerda Aylan con los ojos brillantes y una lágrima que se escapa sin permiso.

El vacío que dejó su madre es profundo, pero la vida le puso nuevos ángeles en el camino.

Cumpliendo su voluntad, Beatriz Adriana Pérez Álvarez y su esposo Hugo Solano Quiroz iniciaron un largo proceso legal para convertirse en sus tutores. 

Nunca estará solo

Hoy, más que un techo y alimento, le han devuelto la risa, el cuidado y la certeza de que sigue siendo profundamente amado.

Ni Aylan ni su hermana comprenden aún de burocracias o trámites notariales; él sólo sabe que ya no está solo. 

Este Día del Niño lo acompaña una familia que lo abraza con fuerza: sus tíos, quienes hoy son padres, y sus primos universitarios que lo cuidan como hermanos mayores y esa promesa silenciosa de que su historia apenas comienza.

Cita:

“Mi mamá nos llevaba a pasear con mi hermana Yuritzy y nos divertíamos mucho”, Aylan Jesús, Usuario del CRIT