El desplome de remesas en abril encendió las alertas económicas en México. De acuerdo con el Banco de México (Banxico), los envíos de dinero desde el extranjero cayeron 12.1% a tasa anual, sumando 4 mil 761 millones de dólares.
Asimismo, esta baja coincide con el endurecimiento del discurso antimigrante en Estados Unidos, impulsado por el presidente Donald Trump, y la posible aprobación de un impuesto federal a las remesas.

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Desplome de remesas: efectos políticos y económicos en cadena
Además, el retroceso se da en un contexto de tensión migratoria y financiera.
Trump ha revivido su retórica de "deportaciones masivas", mientras el Congreso estadounidense avanza en un proyecto que aplicaría un impuesto de 3.5% a las remesas.
La Cámara de Representantes ya lo aprobó y ahora espera revisión en el Senado.
Senadores mexicanos viajarán esta semana a Washington para buscar frenar esta iniciativa mediante el diálogo con sus contrapartes estadounidenses.
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¿Qué factores influyen en la caída de las remesas?
Expertos coinciden en que, aunque el dato es preocupante, hay elementos estacionales y estructurales detrás de la contracción:
- Semana Santa se celebró en abril este año, lo que distorsiona comparativos
- Migrantes enviaron más dinero antes, por miedo a nuevas políticas migratorias
- Mayor vigilancia financiera en EU.
- Temor creciente por deportaciones y arrestos en la frontera
- Posibles vínculos con la caída del tráfico de fentanilo y flujos ilícitos
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Panorama regional y perspectivas
En 2024, México recibió 64 mil 745 millones de dólares en remesas, equivalentes al 3.5% del PIB.
Aunque es un volumen récord, representa una proporción menor comparado con países como Nicaragua, Honduras o El Salvador.
Finalmente, aún no se proyecta una caída drástica anual, pero el nerviosismo crece ante la posibilidad de un retorno de políticas restrictivas en EU.