El sector gaming en México ha experimentado un crecimiento sostenido y significativo durante las últimas décadas, consolidándose como uno de los mercados más relevantes en América Latina. Este auge no solo incluye a los videojuegos tradicionales, sino que también abarca al juego online y al casino online, los cuales han ganado una notable popularidad entre los usuarios mexicanos gracias a la expansión de internet y el acceso a dispositivos móviles.
En los años noventa, el gaming en México estaba aún en desarrollo, con consolas de todas las naturalezas formando parte del entretenimiento casero de miles de jóvenes. Sin embargo, el acceso a los videojuegos era limitado por el costo y la distribución. Con la llegada del nuevo milenio, y en especial con el crecimiento del internet de banda ancha, las computadoras personales y luego los smartphones, el acceso al mundo del gaming se volvió más democrático y globalizado.
Hoy en día, México es uno de los principales consumidores de videojuegos en América Latina. Millones de usuarios juegan a diario, ya sea en consolas, PC o dispositivos móviles. Plataformas lideres en cuanto a consolas tienen una fuerte base de jugadores en el país, mientras que títulos multijugador y eSports han conquistado a un público joven que también consume contenido relacionado a través de plataformas de difusión de vídeos en directo.
En este sentido, los videojuegos han formado parte esencial del entretenimiento de millones de personas, atravesando generaciones y adaptándose a cada época tecnológica. Desde las consolas clásicas hasta el entorno móvil y online, ciertos títulos han calado profundamente en la cultura gamer mexicana, convirtiéndose en fenómenos sociales.
Durante los años noventa y principios de los 2000, son muchos los títulos que protagonizaron una lucha encarnizada por hacerse con una gran cuota de mercado en el gaming. Posteriormente, franquicias de videojuegos deportivos se volvieron imprescindibles, especialmente por la fuerte cultura futbolera del país. En reuniones familiares o entre amigos, estos títulos eran sinónimo de competencia y diversión.
Paralelamente, el juego online ha vivido una auténtica explosión. El crecimiento de plataformas digitales de entretenimiento y apuestas ha sido acelerado, impulsado por el aumento en la conectividad, la familiaridad con los métodos de pago digitales y la búsqueda de nuevas experiencias interactivas. El casino online ha encontrado en México un terreno fértil para crecer, especialmente durante los últimos años. Juegos como póker, blackjack, ruleta y las populares tragamonedas están al alcance de cualquier usuario con acceso a un teléfono inteligente.
En resumen, el sector gaming en México ha dejado de ser un pasatiempo de nicho para convertirse en una industria dinámica y en expansión, que abarca desde los videojuegos tradicionales hasta el casino online. La tecnología, la conectividad y la innovación seguirán siendo factores clave en el crecimiento de este ecosistema digital, que ya forma parte fundamental del ocio y la economía mexicana del siglo XXI. Su techo, aun no es conocido y tiene un margen de crecimiento muy alto.