Aunque la Ley Silla ya es oficial en todo México, en muchas estaciones de servicio en Cancún, especialmente las que operan bajo la marca Pemex, el derecho a sentarse aún no se respeta. Así lo denunciaron trabajadoras que aseguran pasar toda su jornada laboral de pie, sin descanso y bajo constante vigilancia.

Graciela, despachadora en una gasolinera de la ciudad, señaló que sus empleadores no han implementado ningún cambio tras la publicación de la reforma, a pesar de conocerla:

“Estamos todo el tiempo parados. No nos dejan ni ir por un refresco. Hay cámaras vigilando, y si nos ven sentados, nos llaman la atención. Incluso comemos de pie”.

Más de 70 estaciones en Cancún y el derecho laboral sigue sin cumplirse

Según datos del portal especializado Locator, en Cancún hay aproximadamente 75 estaciones de servicio, de las cuales se estima que al menos 40 operan bajo la franquicia Pemex. En estas, el cumplimiento de la nueva norma aún es inexistente, según testimonios del personal.

El problema no es menor. Trabajar de pie por ocho o más horas diarias, sin pausas para descansar ni sillas disponibles, afecta directamente la salud física y mental de los trabajadores, advierte la Secretaría de Salud.

Las consecuencias de estar de pie todo el día

A corto plazo:

  • Dolor muscular en piernas, pies y espalda baja
  • Calambres, hinchazón y retención de líquidos
  • Cansancio generalizado por sobreesfuerzo postural

A mediano y largo plazo:

  • Aparición de várices
  • Lumbalgia crónica y dolor articular
  • Trastornos circulatorios como trombosis
  • Fatiga persistente y estrés laboral

La Ley Silla aún no se aplica

La Ley Silla, publicada el 4 de junio de 2024 en el Diario Oficial de la Federación, establece que las empresas deben proporcionar asientos a los trabajadores cuando la labor no requiera estar de pie de forma permanente.

La norma es parte de una reforma a la Ley Federal del Trabajo, y concede 180 días naturales para su implementación antes de que puedan aplicarse sanciones.

No obstante, organizaciones laborales han advertido que la efectividad de esta reforma dependerá de la voluntad de los empleadores y de la capacidad del Estado para inspeccionar y hacer cumplir la ley.