El ambiente político que se vive en el país es, por decir lo menos, convulsionado y de confrontación. Por ejemplo, mientras que unos tratan de reincorporarse al quehacer público con nuevas siglas, algunos de los que ahora están en la cumbre se exhiben en viajes por el viejo continente.

En el caso de los viajes hay que decir que no todos andan en esas andadas, es decir, viajar y visitar lugares que representan el lujo y la opulencia no, algunos si trabajan y señalan aquello que no es correcto porque no quieren que los llamados de austeridad republicana y el decálogo de humildad se pierda. 

Se le ha visto en viajes de lujo, por ejemplo y para no dar una larga lista de nombres, al diputado Ricardo Monreal, a quien al parecer ya no le importa mucho el que dirán y si mancha a Morena pues ya dijo que se retirará de la política. 

Por cierto uno de sus hermanos, el que ahora quiere gobernar Zacatecas ya dijo que buscará la gobernatura por otro partido, ya que en Morena sostienen que no habrá nepotismo. Vamos a ver si se cumple.  

Pues bien, mientras todo eso ocurre en el partido en el poder, los políticos desplazados y los que se quedaron sin partido se agrupan en una nueva organización, Somos México, por medio de la cual quieren dar la batalla en el 2027. Consideran que a nivel país se han cometido errores y que ellos los capitalizarán. Ya veremos. 

Pero el asunto es que son los mismos que solo cambien de piel, o siglas en estos casos, ejemplo, el priísta Raymundo King, quien ocupó desde la dirigencia estatal del PRI hasta una diputación federal en los tiempos de Roberto Borge, y ahora es el referente de Somos México en la capital del estado. Mal por donde se mire. 

La buena noticia es que en Quintana Roo  las autoridades tanto estatal como municipales se han avocado a atender a los ciudadanos, caminar, escuchar y responderle a aquellos que los eligieron en urnas porque la sucesión en todos los cargos de elección popular la tenemos a la vuelta de la esquina. Hasta la próxima.