Juan Manuel Lanz Intzincab, líder del sindicato de taxistas de Mahahual. Credit: Especial. / 24 HQR.

Más de un mes después de que el ejido de Chacchoben aumentara sus tarifas de acceso, los prestadores de servicios turísticos y taxistas de la región siguen esperando una respuesta de las autoridades.

Esta medida, que muchos consideran arbitraria, no solo ha encarecido la visita a la zona arqueológica, sino que también ha reducido el tiempo que los turistas pasan en el sitio, impactando la economía de la comunidad.

El costo de la visita: un aumento que afecta a todos

Actualmente, el ejido cobra 7 dólares por persona, a lo que se suman 5 dólares del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Esto eleva el costo total a 12 dólares por visitante, sin considerar el transporte, el estacionamiento y otros gastos.

Este incremento ha generado un gran malestar entre los operadores turísticos, quienes ven cómo los visitantes optan por recorridos más rápidos y limitan sus consumos en la zona.

Juan Manuel Lanz Intzincab, líder del sindicato de taxistas de Mahahual, lo resume claramente:

“La gente no se queda, y eso nos afecta a todos, desde los que vendemos comida hasta los que ofrecemos transporte”.

Zona arqueológica Chacchoben. Credit: Luyten / Wikipedia

Incumplimiento de acuerdos y monopolio de estacionamiento

Según Lanz Intzincab, este aumento en las tarifas es una sorpresa, ya que contraviene acuerdos previos.

En una mesa de diálogo con autoridades estatales y representantes ejidales, se había pactado mantener precios accesibles para impulsar el turismo.

Sin embargo, el presidente ejidal, Salvador Ojeda Medina, ordenó el incremento sin previo aviso, según denuncia el dirigente.

El descontento no termina ahí. El manejo de los espacios de estacionamiento también es un punto de conflicto.

El líder de los taxistas señala que se le da preferencia a los autobuses de una empresa en particular, lo que genera una competencia desleal y más molestias.

Situación insostenible

Este problema no solo afecta a los taxistas, sino también a todas las tour operadoras.

“Hicimos un documento conjunto y lo entregamos a la secretaria de Gobierno para que nos den respuesta, porque mañana el ejido puede decir ‘deme 20 dólares’ y el Gobierno del estado no lo puede permitir”, afirmó Lanz.

La visita a Chacchoben, sumando el cobro del ejido, el del INAH y el transporte, puede llegar a costar más de 20 dólares por persona. Esta cifra la hace menos atractiva en comparación con destinos cercanos como Bacalar o Mahahual, donde la oferta es más accesible.

La paciencia se agota. El dirigente de los taxistas recordó que en el pasado estas tensiones ya habían provocado protestas. “Les pedí calma porque estábamos en pláticas y nos dijeron que nos iban a apoyar, pero ha pasado mucho tiempo y la gente ya se está cansando”, advirtió