En el Everest, un equipo de drones de carga pesada se unió a la temporada de escalada para combatir la creciente contaminación en la cima más alta del mundo.
Estos dispositivos transportaron más de 300 kilos de residuos desde el Campamento 1, ayudando a limpiar un espacio que llegó a ser apodado “el basurero más alto del planeta”.
Tecnología innovadora llega al Everest
Los drones DJI FC 30, capaces de cargar hasta 30 kilos por vuelo, demostraron ser más rápidos y seguros que los métodos tradicionales, como helicópteros o porteadores.
En apenas 10 minutos, un dron logra trasladar la misma cantidad de basura que 10 personas en seis horas, lo que reduce riesgos en zonas mortales como la cascada de hielo del Khumbu.
Autoridades y guías locales celebraron la iniciativa, señalando que también ha permitido llevar oxígeno, cuerdas y escaleras a los equipos de preparación, aligerando su labor en las rutas de ascenso.
Un cambio revolucionario en el Everest, la montaña más alta
Expertos consideran que esta acción marcará un antes y un después en la gestión ambiental del Everest.
Además de contribuir a su preservación, la tecnología abre la puerta a proyectos similares en otras cumbres del Himalaya, como el Manaslu, donde se implementará el próximo mes.
(Con información de AFP)