Día del Pueblo, populismo legislativo en formato semanal
El Grupo Legislativo de Morena en Quintana Roo presentó como inédito el proyecto del Día del Pueblo, una iniciativa que obligaría a los Gobiernos municipales a realizar audiencias públicas semanales.
El discurso suena grandilocuente: cercanía, humanismo, democracia directa. Pero en la práctica, parece más un ejercicio de populismo legislativo que una solución real a los problemas del estado.
Las asambleas informativas en los 11 municipios no garantizan resultados, sólo más actos protocolarios disfrazados de participación ciudadana.
Morena apuesta por un formato de consulta que se reduce a escuchar quejas sin capacidad de respuesta. Convertir la política en ritual semanal no es transformar, es administrar la inconformidad. El pueblo no necesita audiencias, necesita soluciones. ¿Será?
Clausura que exhibe negligencia oficial
El cierre de un banco de materiales en la colonia Mecadesh, en la Zona Continental de Isla Mujeres, revela más que un incumplimiento empresarial: expone la incapacidad del ayuntamiento isleño para prevenir riesgos antes de que se conviertan en amenaza.
¿Cómo es posible que un negocio de alto riesgo opere sin permisos, sin brigadas de emergencia, sin extintores y sin las mínimas medidas de protección civil? La clausura llega tarde y sólo después de que la irregularidad se volvió insostenible. El discurso oficial presume compromiso con la seguridad, pero en realidad muestra omisión y tolerancia prolongada.
No basta con clausurar un sitio y exhortar a cumplir la ley; la autoridad debe garantizar que estas irregularidades no existan en primer lugar.
La prevención no se ejerce con comunicados, sino con inspecciones constantes y sanciones inmediatas. Mientras tanto, la ciudadanía queda expuesta a riesgos que pudieron evitarse. ¿Será?
Una iniciativa necesaria, pero atrapada en la inercia legislativa
La propuesta presentada por el diputado Hugo Alday Nieto para combatir el turismo sexual infantil en Quintana Roo merece reconocimiento. Se trata de un tema urgente, que coloca en el centro la protección de niñas y niños frente a una de las problemáticas más graves que enfrenta el estado.
La iniciativa refleja sensibilidad y compromiso, pues busca cerrar espacios de impunidad y fortalecer la legislación en un territorio que lamentablemente figura entre los primeros lugares de explotación sexual infantil.
Sin embargo, el camino hacia su aprobación es complejo. Más de una decena de proyectos impulsados por Alday Nieto —entre los que incluye la de turismo sexual infantil, la atención a desapariciones de personas y la regulación de vapeadores— permanecen estancados en comisiones, sin debate ni dictamen.
La inercia legislativa convierte propuestas de alto impacto en expedientes olvidados. ¿Será?

