Ricardo Hernández
Cuinba, empresa inmobiliaria dueña de 1.2 hectáreas del zoológico de CrocoCún, se deslindó de los señalamientos que la acusan del descuido de los animales y de la muerte de un venado cola blanca.
Este martes, la compañía inmobiliaria, se deslindó de la acusación de descuido de 100 venados, 90 cocodrilos, 62 tortugas y cuatro coatíes e, incluso, de la muerte de un ejemplar de cola blanca.
El documento niega que haya prohibido el paso al personal del zoológico. “A pesar de que la Profepa delegó de nuevo la responsabilidad a la empresa CrocoCún, al momento no han acudido al terreno para alimentar a las especies, donde pueden entrar de forma controlada en la puerta lateral que se encuentra sobre el lote 2, al final del muro”.
“Se los dejó en custodia provisional (a Cuinba), y posteriormente recalcaron que no contaban con los elementos para acreditar la legal posesión de los ejemplares. De tal suerte que la empresa CUINBA mantiene desde hace un mes posesión ilegal de los animales y sin permitir que ningún cuidador o especialista del zoo los cuide y alimente”, señalan.
“Cuinba S. A. de C. V., a cargo de los señores Alejandro Monroy Alcalá, José Eduardo Plasencia Bribiesca y Hernán Alonso Plasencia Bribiesca, no cuenta con ningún documento que demuestre la legal posesión de más de una hectárea de Croco Cun.”, añadió el zoológico.
El Congreso estatal hizo un llamado a los titulares de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para
realizar acciones inmediatas para salvaguardar la integridad de los ejemplares.
El exhorto fue sometido a votación ante el Pleno este miércoles y aprobado. En el documento se reconoce que, desde 1997, CrocoCun funge como un espacio cuya operación permite garantizar el
bienestar de la fauna silvestre de la región, contribuyendo con la conservación de la biodiversidad.
Por ello, los legisladores advierten que la invasión realizada constituye un claro delito ambiental. “La gravedad de la situación indica la necesidad de que sea atendida y resuelta a la brevedad para
proteger la vida y salvaguardar la integridad de las especies animales que se están viendo afectadas”.
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Conflicto de terreno
El 19 de febrero alrededor de 30 hombres armados con machetes, palos y otras armas blancas, irrumpieron violentamente en las instalaciones de CrocoCún e invadieron un área de aproximadamente diez mil metros cuadrados, en donde se encuentran decenas de animales, entre ellos especies en peligro de extinción y hembras de venado preñadas, dijo Ernesto Zazueta, presidente de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (Azcarm). Para el 11 de marzo, el organismo informó que los ejemplares habían comenzado a morir.
De acuerdo con él, estas personas mantienen tomada la segunda sección del Centro de Conservación y han impedido, en todo momento, el acceso al personal especializado para alimentar y cuidar a los ejemplares que ahí habitan, lo que significa que llevaban hasta 21 días sin ser debidamente alimentados y sin recibir los cuidados que requieren para sobrevivir.
“Desde la toma ilegal del área, ningún veterinario ni cuidador del parque ha sido testigo del ingreso de comida en forma de forraje o concentrado, esencial para una correcta alimentación y para la gestación de las hembras de venado preñadas que ahí se encuentran y de los cervatillos que vienen en camino. Y hoy, tristemente, nos han informado que ya hay al menos un venado muerto”, comunicó.
Zazueta agregó que el tema del predio es un asunto legal que no debe significar poner en riesgo la vida de tantos animales silvestres.