Por Eugenio Pacheco
Chetumal.- Los desfondes en las calles del primer cuadro de la ciudad son un barril sin fondo para los recursos públicos, y continuarán apareciendo en el corto plazo, reconoció el titular de la Secretaría de Obras Públicas, William Conrado Alarcón.
Aseguró que en la península no se cuenta con la tecnología, ni el equipamiento necesario para realizar los estudios de mecánica de suelo, que resuelvan en definitiva el problema.
Los hundimientos se presentarán nuevamente en el corto plazo, y la estrategia para que no se deterioren las calles es invertir en el relleno de los socavones cada vez que aparezcan.
Consideró que la temporada de lluvias podría ser el indicador respecto a la durabilidad de los trabajos.
A decir del funcionario, el problema es grave, ya que la zona es húmeda, además de que los escurrimientos de agua siempre corren en dirección a esa parte de la ciudad, y una gran cantidad lo hace por el subsuelo.
“Hemos trabajado y coincidido con los grupos de ingeniería del Tecnológico de Chetumal y de la Universidad de Quintana Roo, en que no existe en la zona ninguna forma, ni equipos para investigar qué pasa en el subsuelo, no lo tenemos en la península, de ahí la dificultad de resolver los problemas de socavones”, explicó.
Advirtió que de manera natural y por lo lluvioso que es esta zona tropical, las bajadas y escurrimientos de agua son constantes, y aun cuando se tapan los pasos subterráneos, éstos siempre buscan nuevas rutas para llegar al mar, en este caso la bahía.
Consideró que se debe hablar de millones de metros cúbicos del vital líquido que anualmente se deslizan a través de las calles.
Aseguró que sí puede darse una mayor durabilidad y vida a las vías que se están reconstruyendo, otorgándoles mantenimiento puntual y constante, es decir, se atienda de inmediato los hundimientos cada que vayan apareciendo.