LUIS FERNANDO REYES Y NORMA HERNáNDEZ
Como hace casi 20 años, el presidente estadounidense amenazó a un grupo terrorista internacional después de sufrir un ataque a sus símbolos: en 2001 fueron las Torres Gemelas y el Pentágono; ayer, las vidas de al menos 13 soldados de su Ejército en Kabul, Afganistán.
Revés a política fronteriza de Joe Biden
Los cazaremos y los haremos pagar (ÔǪ) los terroristas de ISIS-K no van a ganar”, advirtió Joe Biden en conferencia de prensa desde la Casa Blanca.
Con sus declaraciones comienza una nueva etapa del enfrentamiento armado entre Estados Unidos y grupos yihadistas, que se mantuvo suspendido los últimos 20 años gracias a la estancia de las fuerzas armadas de EU y la OTAN en el país, donde el grupo talibán (la amenaza original) estaba neutralizado y reinaba una frágil paz bajo un Gobierno nacional.
Después de emitir un mensaje de 30 minutos, la vocera de Presidencia, Jen Psaki, tomó preguntas de los periodistas, aún incrédulos sobre las futuras acciones del Gobierno de la Unión Americana: “No lo pudo haber dicho más claro, a ISIS-K los vamos a perseguir y a matar”, reiteró.
Joe Biden ofrecerá un mensaje sobre la situación en Afganistán
Cuando en la capital afgana ya era la noche del jueves 26 de agosto, dos explosiones se registraron en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional Hamid Karzai, donde se llevan a
cabo las labores de evacuación de miles de ciudadanos europeos y locales desde hace 12 días.
Mientras la prensa internacional informaba de más de 80 muertos (entre ellos 13 soldados norteamericanos) y 140 heridos, fuentes de los talibanes se referían a más de 250 personas las timadas.
A cuentagotas, durante las siguientes horas tras los atentados se supo que los autores fueron integrantes del grupo radical yihadista, contrario a los talibanes ISIS-K (Estado Islámico, EI), quienes se atribuyeron la agresión, informó el sitio especializado SITE.
Los mismos talibanes (incluso más moderados que el EI), a través de su portavoz Zabihullah Mujahid, condenaron “firmemente” el ataque, pero señalaron que “tuvo lugar en una
zona donde las fuerzas estadounidenses son responsables de la seguridad”.
SALIDA URGENTE
Los ataques complican las labores de evacuación de miles de personas aliadas de los países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y de los mismo afganos.
Francia intentará evacuar a cientos de personas más, afirmó el presidente Emmanuel Macron, advirtiendo que las próximas horas serán “extremadamente arriesgadas”.
En tanto, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que las fuerzas aliadas tenían que seguir evacuando a la mayor
gente posible.
A pesar de todo, Biden reiteró que los vuelos de evacuación continuarán hasta sacar al último aliado o al 31 de agosto.