CDMX.- A fines de marzo, a través de una sincera columna en The New Yorker, la actriz Emilia Clarke relató que sufrió dos aneurismas en pleno despegue de su carrera en Hollywood. “En mis peores momentos llegué a pedir a los médicos que me dejaran morir”.
La estrella que da vida a Daenerys Targaryen en la exitosa serie de HBO estuvo a punto de morir tras la primera temporada de Game of Thrones en 2011 luego de sufrir dos aneurismas. En un artículo en primera persona para el citado medio, Clarke, de 32 años, decidió hacer público uno de los episodios más difíciles de su vida.
“Nunca he contado esta historia públicamente, pero ahora es el momento”, decía al comienzo de su desgarrador testimonio: “Justo cuando todos los sueños de mi infancia parecían haberse hecho realidad, casi perdí mi mente y luego mi vida”.
Ahora, en una entrevista para CBS, la intérprete inglesa detalló el horror que vivió durante aquellos meses, y mostró algunas imágenes de ese momento.
En las fotos que difundió se la puede ver en bata, internada, y con heridas quirúrgicas. “La primera vez fue difícil, y la segunda me resultó mucho más difícil ser optimista”, repasó.
Cuando Clarke fue internada y operada por estas aneurismas tenía apenas 24 años, ocurrió en el 2011 y recién había finalizado el rodaje de la primera temporada de Game of Thrones, que el próximo fin de semana llegará a su fin cuando se estrene la última temporada.
Durante la entrevista, también admitió que no fue nada fácil para ella volver al set del show después de la hemorragia cerebral, pero que luego se convirtió en su salvación.
Tras la operación y varias semanas de recuperación, la actriz volvió a su trabajo en Game of Thrones. Sin embargo, permanecía un temor, ya que se le había detectado una segunda aneurisma al otro lado de su cerebro. Comenzó siendo más pequeño que el anterior, pero para 2013 había crecido el doble. Los médicos decidieron operarla nuevamente.
“Durante mucho tiempo pensé que afectaría mi capacidad para actuar, eso fue una profunda paranoia”
Afortunadamente tras esa intervención, la artista superó la enfermedad, aunque con gran dificultad. “La recuperación fue aún más dolorosa de lo que había sido después de la primera cirugía. Parecía que había pasado por una guerra más espantosa que cualquiera que haya experimentado Daenerys”, reconocía en su columna.
Con su testimonio, Clarke quiere dar visibilidad a la asociación benéfica SameYou, que tiene como objetivo acompañar a las personas que se recuperan de lesiones cerebrales.
Con información de Infobae