La restauración del daño al medio ambiente que generó Calica durante su operación en Solidaridad y Cozumel es de un costo superior a 34 mil millones de pesos, informó la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en un análisis de la actividad minera ejecutada por la empresa.
La dependencia federal precisó que el “costo social” es de 34 mil 650 millones 986 mil 364 pesos y que es “técnicamente imposible la regeneración de su cobertura vegetal”.
Según el “dictamen de impactos ambientales derivados del proyecto de extracción industrial de roca caliza a cargo de la empresa Calica (hoy Sac-Tun) en los municipios de Solidaridad y Cozumel, Quintana Roo” la extracción a cielo abierto del material implica modificaciones en el paisaje, pues provocan la destrucción de ecosistemas, cambios geomorfológicos, ajustes en el uso de suelo con pérdida de hábitats, generación de ruidos, vibraciones, erosión, entre otros efectos adversos.
El análisis abarca los predios El Corchalito y La Adelita, en Solidaridad, así como La Rosita, en Cozumel.
“Las condiciones del flujo regional y de la calidad del agua del sistema de ríos subterráneos y cenotes que cruza El Corchalito y La Rosita han sido alterados por la presencia de la mina de extracción de material pétreo”, refiere el informe.
Exigen cerrar Calica por daños a la salud
Además, refiere la dependencia, el que el predio La Adelita no haya sido explotado aún “se vuelve apremiante que no se inicie la extracción, ya que la región está impactada por la actividad”.
Y es que la sobreexplotación de la actividad generó daños irreversibles en la forma de vida de la flora, fauna y la humanidad, pues en esa área no hay labores agrícolas o ganaderas y tampoco asentamientos urbanos.
“La severidad de los problemas ambientales depende del alcance de la minería y la sensibilidad ecológica del sitio minero. Tanto los ecosistemas terrestres como los acuáticos se ven afectados y los efectos podrían extenderse más allá de los límites del área minera y ser a largo plazo”, apunta el reporte de la dependencia.
La Semarnat instó a controlar la influencia de las partículas provenientes de los predios El Corchalito y La Rosita, pues el material pétreo supera el dosel e impacta en los terrenos circundantes y, por ende, a las poblaciones aledañas.