Alba Areli Cerón Ortíz, subdirectora de Vigilancia Epidemiológica de los Sesa, hizo un llamado a los turistas para tomar las precauciones pertinentes ante la leishmaniasis, que va en aumento en el estado.
“Siempre ha habido leishmaniasis en el estado, somos una zona endémica porque tenemos el vector y tenemos animales en el campo que están contagiados de esta enfermedad porque los picaron en el campo y estos los transmiten a los humanos”, dijo la especialista.
Por tanto, pidió tomar precauciones, a fin de evitar contagios, como usar ropa que cubra brazos y piernas, así como repelente, de preferencia orgánico.
De acuerdo con los Sesa, en 2022 hubo 500 casos de leishmaniasis en Quintana Roo, muy superior a los 272 casos de un año previo. En lo que va del año se cuentan ya 31 casos.
“Las instituciones que han atendido casos de leishmaniasis son la Secretaría de Salud de Quintana Roo, el IMSS y, en menor medida, el ISSSTE”, dijo
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Piden tomar precaución por Leishmaniasis
Cerón Ortíz, subdirectora de Vigilancia Epidemiológica de los Sesa, aseguró que, en tanto llegaba el medicamento, algunos pacientes fueron atendidos con itraconazol y, los que cuentan con mayor poder adquisitivo, con crioterapia, aplicada por dermatólogos.
El Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, de la Secretaría de Salud, informa que las dos especies que predominan en el sureste del país –de las 11 que son vectores en México– solo afectan el cutis y la mucosa.
A decir de Fernando García, docente de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM, esta enfermedad va en aumento como consecuencia de la ampliación de las manchas urbanas y de megaproyectos como el Tren Maya en zonas selváticas.
Se trata de una de las enfermedades de salud pública más desatendidas en México, de la que existe poca información estadística y menos educación para la prevención en comunidades rurales y escuelas, de acuerdo con el especialista, adscrito a la del departamento de Medicina
Preventiva y Salud Pública de la Universidad.
“Es una enfermedad transmitida por vector. Se transmite por una mosca, un flebotomo, conocido como mosca chiclera, muy pequeñita. Su hábitat natural es selvas y bosques. Es común entonces que se haya visto un incremento de la enfermedad, puesto que estamos invadiendo cada vez más su hábitat. Por la urbanización y por los trabajos asociados al Tren Maya, obviamente, la gente va a estar más expuesta a esta enfermedad”, dijo García.
Trabajadores del Tren Maya, el proyecto con la mayor impacto en la península han sido contagiados con leishmaniasis.
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