Hay en Quintana Roo 51 niños y niñas huérfanos que son atendidos en la Casa Hogar del gobierno del estado en Chetumal que podrían ser adoptados, de estos, al menos 15 son menores de entre 1 y 5 años, y el resto son niños y niñas de 5 años en adelante, según informó la directora del Sistema DIF de ese estado, Abril Sabido Alcérreca.

Sabido Alcérreca destacó que el proceso de adopción puede ser más complicado para los niños institucionalizados, que representan alrededor del 50% de los menores en la casa hogar, ya que muchos de ellos son hermanos y las autoridades no quieren separarlos.

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“Tenemos 51 niñas y niños en la casa hogar que pueden ser adoptados, aproximadamente 15 están en el rango de 1 a 5 años, que son los que más quieren adoptar las personas”, dijo Sabido Alcérreca.

Dijo que los menores llegan a la casa hogar por diversas situaciones, como violencia o abandono, y en algunos casos no tienen familia directa que les pueda proveer de las condiciones aptas para su desarrollo.

“Hace poco tuvimos un caso que vio la gobernadora que encontraron en la calle y llevamos a casa hogar, afortunadamente la abuelita presentó red de apoyo y fue restituido”, afirmó.

La directora del DIF también mencionó que están trabajando para mejorar las condiciones de los niños y niñas en la casa hogar, proporcionándoles atención médica y psicológica, así como actividades recreativas y educativas.

“Estamos trabajando para brindarles una mejor atención a los niños y niñas de la casa hogar, para que puedan tener una infancia feliz y saludable”, señaló Sabido Alcérreca.

La adopción de niños y niñas es un proceso que puede llevar tiempo y es importante que las personas interesadas en adoptar sigan los procedimientos establecidos por las autoridades para garantizar la seguridad y el bienestar de los menores.

La Ley de Adopción del Estado de Quintana Roo establece los requisitos necesarios para llevar a cabo el proceso de adopción. Según el Artículo 18 de dicha ley, se requiere tener capacidad para adoptar, tener al menos 15 años más de edad que el menor a adoptar, contar con medios suficientes para proveer la subsistencia y educación del menor, que la adopción esté basada en el interés superior del menor y contar con el certificado de idoneidad.

En caso de ser extranjero, además de cumplir con los requisitos establecidos en la ley, se debe acreditar la legal estancia en el país y en caso de no residir en el país, se debe contar con el permiso de la autoridad de adopciones del país de origen para adoptar a un niño, niña o adolescente mexicano.

Es importante señalar que la adopción es un proceso delicado que requiere de un compromiso serio y responsable por parte de quienes deseen llevarlo a cabo, ya que se busca asegurar el bienestar y protección de los menores de edad que son adoptados.