Estados Unidos.- Estados Unidos realizará redadas masivas contra miles de migrantes a partir del próximo domingo 14 de julio, una operación que el Presidente Donald Trump demoró hace semanas debido a la resistencia entre las propias autoridades de inmigración, aseguraron dos oficiales al diario The New York Times.
Las redadas, coordinadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), se llevarán a cabo durante varios días e incluirán deportaciones “colaterales”, con las cuales arrestarían a migrantes que se encuentren en la escena, a pesar de no ser el objetivo de los agentes.
Los oficiales, que hablaron bajo condición de anonimato, señalaron que algunos miembros de las familias arrestadas serán recluidos en centros de detención en Texas y Pensilvania, aunque las limitaciones de espacio podrían hacer que sean alojados en habitaciones de hotel hasta que su documentación de viaje esté lista.
Los agentes citados por el Times aseguraron que ICE busca arrestar a cerca de 2 mil personas con órdenes de deportación. Algunos de los migrantes no se presentaron a sus citas en tribunales y permanecen en el país de manera ilegal, aseguran.
El objetivo de ICE es deportar a las familias lo más rápido posible, señalaron, mientras que la operación se llevará a cabo en al menos 10 ciudades con un alto índice de población migrante, como Los ángeles, Chicago o Miami.
Mientras que la amenaza de deportación ha sacudido a las comunidades migrantes de todo el país, algunos agentes han expresado temores sobre el arresto de bebés y niños pequeños.
Asimismo, notaron que la operación podría tener un éxito limitado ya que se ha corrido la voz entre las comunidades sobre maneras de evitar el arresto, como negarse a abrir la puerta de su casa cuando un policía intente contactarlos.
Los elementos de ICE no tienen permitido ingresar a una casa por medio de la fuerza.
A principios de junio, el Secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional, Kevin McAleenan, pidió suspender la operación, luego de mostrar su preocupación por los padres indocumentados que pudieran ser separados de sus hijos estadounidenses.
Después de una tensa reunión con la Casa Blanca el 21 de junio, dos días antes de iniciar, el Presidente Trump retrasó el operativo pero amenazó con reanudarlo si la bancada demócrata no buscaba un esfuerzo común con los republicanos.
Esta semana, las autoridades migratorias revelaron una caída del 28 por ciento en los arrestos fronterizos, equivalente a 40 mil personas, luego de los esfuerzos de EU y México para frenar el flujo proveniente de Centroamérica.
Con información de Reforma