Cancún.ÔÇö A pesar del desplome en la llegada de turistas estadounidenses, mercado que no creemos que se recupere este año, aunque su caída se está compensando con mercados como Canadá, que fue muy bueno en el periodo enero-abril, Francia, Colombia y Ecuador, que de nada se convirtió en el mercado 13 para México, este año podría cerrar con un crecimiento del 5 por ciento en la afluencia de visitantes, opinó Francisco Madrid Flores, director de la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac México.
En el marco de la conferencia empresarial “El turismo en México, situación actual y perspectiva”, organizada por el Consejo Coordinador Empresarial del Caribe (CCE) destacó que el pronóstico se basa, además, en el hecho de que el turismo no fronterizo reporta crecimiento de entre 2 y 3 por ciento, tanto el aéreo como el terrestre, la frontera está mejor, en 8-9 por ciento, y la combinación de ambos da un crecimiento del 5 por ciento.
Sin duda, hoy no sólo en turismo, el país enfrenta grandes retos, pero esta actividad presenta una situación compleja, derivada de diferentes factores, algunos de los cuales están más cerca del resorte de la actuación de la política pública y debería actuarse, pues lo que no se puede hacer es dejar pasar las cosas, expuso.
Para el especialista no se debe cargar todo a este gobierno, pues la desaceleración en el turismo hacia el país empezó en agosto 2017, luego de que en 2012-2017 hubo un crecimiento extraordinario, de poco más del 10 por ciento, tanto en llegada de turismo internacional como en ingresos.
Sin embargo, en agosto de 2017, con la alerta de viaje especialmente dura que emitió el Departamento de Estado de Estados Unidos, el mercado reaccionó de manera inmediata.
El Travel Advisor por sí mismo no es un problema, es síntoma de un problema que tiene que ver con la inseguridad en los destinos turísticos o en algunos destinos turísticos. El efecto fue fuerte, diferenciado por destino y segmento y afectó sobre todo al turismo de grupos, añadió.
Con todo, dijo que México siguió creciendo, pero a un ritmo menor. En 2018 al patrón de desaceleración se sumaron la inseguridad y, en el caso del Caribe Mexicano, el tema del sargazo. El crecimiento llegó al 5%.
A eso hay que adicionar este año dos factores importantes: una desaceleración del mercado interno, que más allá de la discusión de recesión o no un crecimiento como el que anunció hoy el Inegi de 0.1% es francamente exiguo para mantener una industria como la turística, y la aparente falta de atención a los temas turísticos.
Un indicador claro es la decisión de abandonar el presupuesto promocional con fuentes de financiamiento público.
Está mal que desaparezca el CPTM, pero lo peor es que la decisión se dio sin debate y discusión, simplemente lo cerraron y se acabó. Seguramente tenía puntos negativos, pero también muchos méritos, uno de ellos es que fue resultado de un acuerdo de Estado, lo que sucede pocas veces en México. En la Cámara de Diputados salió por mayoría abrumadora y el dirigente del PRD, que votó a favor, era el actual presidente de México.
Había vicios, algunas erogaciones que no se justificaba pagar con esos recursos y quizá haya actos de corrupción que habría que perseguir. Lo que no puede haber es un país que no invierta recursos públicos en promoción turística, como lo hacen los grandes destinos del mundo: Españas, Estados Unidos, Canadá. El efecto de la falta de promoción se dejará sentir cada vez más conforme pase el tiempo.
Los recursos son fundamentales. Temas como el sargazo y la inseguridad requieren no sólo inversión en publicidad, sino en la propia gestión de la crisis, gestión que, en el caso de la promoción, no me parece que vaya a alcanzar con embajadas y consulados. Necesariamente necesitamos otras herramientas e instrumentos que permitan actuar.
Para el entrevistado, la desaceleración en México es especialmente visible en el mercado de Estados Unidos, que reporta una disminución de 0.4% en el periodo enero-junio. Si estuviera cayendo en sus viajes al exterior, nos tocaría una parte, pero sigue fuerte, creciendo más del 6 por ciento.
Sin embargo, señaló que no es el único mercado a la baja. Argentina se desplomó, Brasil, Italia salió de los 15 mercados emisores. En contraparte, Canadá lo ha hecho bien para evitar un golpazo en la demanda.
Hay resultados mixtos, desaceleración, resultados negativos, mercado doméstico debilitado. La industria sigue siendo importante, no todo está acabado, no hay crisis, pero estamos perdiendo oportunidades.
Si el Consejo de Diplomacia Turística instalado recientemente tiene presupuesto, puede ser una solución. Sin embargo, el cuerpo diplomático es profesional y sabe hacer las tareas que se le encomiendan, pero tienen un límite humano para atender el cúmulo de asignaciones. Va a ser insuficiente para sustituir al CPTM y estar en contacto permanente con los actores y agentes de la industria. No es problema de capacidad, sino de recursos.
Además, consideró que no se puede decir que la inseguridad está desbordada y afecta al turismo si vienen a México más de 42 millones de turistas internacionales cada año. “No es como sucedió en Turquía hace cuatro años, que el mercado se cayó 25 por ciento”.
Por último, Madrid Flores dijo que en el caso de las divisas, no se atreve a pronosticar si la derrama aumentará porque, con el cambio de responsabilidad en el operativo estadístico, que dejó de hacer el Banco de México y desde agosto del año pasado lo hace Inegi, “se están midiendo bien las cabezas, pero mal las carteras”.
Hoy se está reportando un crecimiento de divisas de entre 14 y 15 por ciento. Creemos que no son cifras comparables, que no hay elementos en el mercado para decir que si la demanda está debilitada, si no hay crecimiento de la oferta, si los hoteles reportan bajas de tarifas, no se explica un crecimiento del 15 por ciento. No decimos que esté mal, más bien pensamos que no son comparables y por eso no estamos haciendo pronóstico en este tema.
Con información de INFOQROO