La Dirección General del Colegio de Bachilleres de Quintana Roo (Cobaqroo) ha decidido revertir la medida que imponía la venta de libros a los estudiantes, después de la fuerte oposición manifestada por el personal docente y la intervención del Sindicato de Trabajadores del Colegio de Bachilleres (Sitacobaqroo).
Venta de libros suspendida por presión docente
El líder del Sitacobaqroo, Jorge Ballote Ek, destacó que la presión ejercida por los docentes fue crucial para que las autoridades educativas reconsideraran su decisión. Los profesores argumentaron que la obligatoriedad de la venta de libros perjudicaba a los estudiantes y atentaba contra la libertad de cátedra.
Notificación Oficial del Cobaqroo
La Dirección General del Cobaqroo oficializó su decisión a través del oficio COBAQROO/DG/DJ/389/VII/2024, en el cual se declara que no existe ninguna obligación para que los estudiantes o sus padres adquieran el paquete de libros previamente seleccionado. Además, se establece que los profesores no están obligados a utilizar dichos libros en sus clases, permitiéndoles emplear los materiales que consideren más apropiados para el proceso educativo.
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Garantía de libertad de cátedra
La Dirección General subrayó que la bibliografía propuesta no será de uso obligatorio ni para docentes ni para alumnos. Se reafirmó el compromiso de no limitar la libertad de cátedra, permitiendo el uso de otros materiales educativos que los profesores consideren pertinentes.
Protesta y reacción del personal docente
El pasado 10 de julio, en señal de protesta, los docentes colocaron mantas en los planteles del Cobaqroo ubicados en los 11 municipios del estado. La imposición de la compra y uso de la bibliografía elegida por la Dirección General, con un costo total de 1,600 pesos por estudiante, provocó una reacción enérgica del personal docente.
Impacto económico de la medida
Fuentes del Cobaqroo y del sindicato indicaron que la medida representaba un gasto aproximado de 20 millones de pesos para las familias de los estudiantes, una carga económica significativa considerando el contexto actual. El sistema de Bachilleres en Quintana Roo imparte educación a más de 16 mil estudiantes, quienes habrían sido afectados por esta medida.
Con esta decisión, la Dirección General del Cobaqroo busca garantizar la calidad educativa sin imponer cargas económicas adicionales a las familias y respetando la autonomía pedagógica de sus docentes.
Este artículo se basa en la publicación de R-360, lee aquí el texto original.