Las recientes inundaciones que afectaron más de 600 hectáreas de cultivos de caña, han puesto en riesgo la subsistencia de numerosos productores agrícolas. La sexta regidora capitalina, María del Carmen García Guevara, mencionó que los ejidatarios afectados se verán obligados a buscar nuevas áreas de cultivo, ya que sus tierras podrían volver a inundarse.
“He visto que la Secretaría de Gobierno ha mostrado interés en el tema y que el líder de la Unión Local de Productores de Caña también ha intervenido, pero no cuento con cifras exactas”, declaró la regidora.
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Estragos en los cultivos
La regidora manifestó que las lluvias, aunque beneficiosas en algunos aspectos, han causado estragos debido a las construcciones en la zona, que impiden el adecuado desazolve del agua.
“Es evidente que el material pétreo utilizado para la obra ha impedido el drenaje natural del agua, lo que ha provocado que el nivel suba y afecte gravemente los cultivos de caña”, explicó. “Esto no sucedía en años anteriores; cuando se bloquea un paso natural, el agua inevitablemente sube, y la caña, al estar expuesta a tanta humedad, termina pudriéndose”, dijo García Guevara.
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Solución
Ante esta situación, sugirió que una posible solución sería reubicar a los productores en otras áreas.
“El Gobierno podría evaluar sus predios y compensarlos, permitiéndoles buscar tierras más adecuadas para la siembra”, comentó y agregó que “de no hacerlo, las pérdidas económicas podrían incrementarse año tras año”.
La situación actual plantea un reto para las autoridades y los productores de Ucum, González Ortega y Xul Há. Mientras tanto, los ejidatarios afectados por las inundaciones enfrentan un futuro incierto, en el que podrían verse obligados a abandonar las tierras que han cultivado durante generaciones en busca de nuevas oportunidades en otros espacios.
Cita:
El Gobierno podría evaluar sus predios y compensarlos, permitiéndoles buscar tierras más adecuadas para la siembra”, María del Carmen García Guevara, Sexta regidora de Othón P. Blanco
