Por Geovanny Zapata
Quintana Roo registró una baja inversión en materia de infraestructura de vivienda nueva, debido al incremento de materias primas como el acero y cemento, y al bajo poder adquisitivo de la población quintanarroense, por lo que la Ley de Asentamientos Humanos presenta una buena opción para dar un respiro a la devastación de la tierra, comentó Oscar Francisco Vivanco Mendoza, director de Edificación y Vivienda del Sureste S.A. de C.V.
La Ley de Acciones Urbanísticas de Quintana Roo, que fue promovida por el diputado independiente Juan Carlos Pereyra Escudero, estipula y autoriza que las desarrolladoras y empresas constructoras puedan hacer casas de menor tamaño, divididas en tres categorías: interés social, media y residencial.
Dicha normativa incluye a la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano del Estado de Quintana Roo, así como las reformas a la Ley de Vivienda, la Ley de Equilibrio Ecológico y la Protección del Ambiente, la Ley de Propiedad de Condominio de Inmuebles y la Ley de Expropiación.
Vivanco Mendoza mencionó que la nueva Ley de Asentamientos Humanos se enfoca en aumentar la cantidad de viviendas por metros cuadrados de tierra, lo que es importante para los municipios que tienen cargas muy onerosas de población.
Recalcó que ciudades de Quintana Roo como Cancún y Playa del Carmen crecen de manera estrepitosa, por lo que es bueno que haya esa racionalidad para aprovechar más el terreno y no seguir depredando.
Enfatizó que a nivel mundial nunca había llegado a tal grado el incremento poblacional, pues ya somos cerca de 8 mil millones de habitantes.
“La tierra no crece y la población sí, entonces es importante pensar en nuevas movidas”, mencionó Oscar Vivanco.
Por otra parte, lamentó que en Quintana Roo existan muchos trámites engorrosos, ya que eso frena el desarrollo, el empleo y la oportunidad de seguir avanzando.