Comunidades mayas de Felipe Carrillo Puerto.
Imagen difundida por la página oficial de Maya Ka'an, que muestra a un anciano de la comunidad maya Senior, que muestra un acto ancestral. Credit: Maya Kaan

Comunidades mayas de Quintana Roo denuncian ante Indautor uso indebido de su patrimonio biocultural

Integrantes de comunidades mayas del municipio de José María Morelos interpusieron una denuncia ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor (Indautor) por presuntas violaciones a la Ley Federal de Protección del Patrimonio Cultural de los Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanas, derivadas del uso indebido de su patrimonio biocultural en el proyecto turístico “Maya Ka’an”.

La acción legal, fue presentada con el acompañamiento del Proyecto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (ProDESC).

Señala afectaciones relacionadas con la creación, promoción y comercialización de este destino turístico impulsado por el Gobierno de Quintana Roo.

Así se dio a conocer en un comunicado difundido por la organización el lunes 13 de octubre.

Captura de pantalla de la conformación del proyecto Maya Ka'an. (página oficial). Credit: Especial.

Un proyecto que mercantiliza la cultura maya

De acuerdo con ProDESC, desde 2010 el proyecto Maya Ka’an, que abarca más de 900 mil hectáreas en los municipios de José María Morelos, Felipe Carrillo Puerto y Tulum, ha sido promovido bajo un modelo de turismo “vivencial” que, según las comunidades, convierte su identidad y tradiciones en un producto comercial.

En 2022, el gobierno estatal formalizó la iniciativa a través de la Declaratoria de Zona Rural Comunitaria con Potencial Turístico Maya Ka’an.

Sin embargo, afirman que no incluyó mecanismos de consentimiento libre, previo e informado.

Tampoco contempló esquemas de participación o distribución justa de beneficios para las comunidades originarias.

Exclusión y afectaciones a los derechos colectivos

Los denunciantes aseguran que la declaratoria y los órganos de gestión del proyecto excluyen la representación indígena, mponiendo requisitos que limitan su participación en la toma de decisiones.

Además, el registro de la marca “Maya Ka’an” ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) fue señalado como una violación adicional que no respeta los derechos culturales y humanos de los pueblos involucrados.

Llamado a proteger el patrimonio biocultural

Las comunidades solicitaron a Indautor investigar las presuntas infracciones y garantizar que cualquier uso del patrimonio biocultural maya se realice con su autorización, participación efectiva y beneficios equitativos, en pleno ejercicio de su derecho a la libre determinación.

“Lo que se busca es que se reconozca el valor del conocimiento, la lengua y las tradiciones de los pueblos mayas, y que no se utilicen como herramientas de mercadotecnia sin consentimiento”, precisó ProDESC en su comunicado.