Jirafas en Kenia son reubicadas.
Peligra la vida de las jirafas en Kenia. Credit: Tony Karumba / AFP

La reubicación de jirafas de Kenia se ha convertido en una acción indispensable para preservar la especie frente a la pérdida acelerada de su hábitat.

En una reciente operación en el este del país, guardabosques guiaron con extremo cuidado a varios ejemplares hacia un vehículo especial con rumbo al Valle del Rift, una zona más segura donde podrán sobrevivir lejos de la presión humana y del cambio climático.

Jirafas de Kenia: por qué es tan complejo trasladarlas

Este tipo de traslado, aseguran conservacionistas, es el último recurso cuando la convivencia entre fauna y comunidades entra en riesgo.

Las operaciones, supervisadas por el Servicio de Vida Silvestre de Kenia (KWS), se han intensificado ante el crecimiento desordenado alrededor del lago Naivasha.

En Kedong Ranch, un sitio turístico clave, decenas de jirafas, cebras y antílopes han sido desplazados por proyectos inmobiliarios que bloquean los corredores naturales entre el monte Longonot y Hells Gate.

Las cercas han dejado a los animales varados y estresados, explicó Patrick Wambugu, del KWS.

El equipo de rescate movilizó camionetas, helicópteros y especialistas para sedar y mover a cinco ejemplares.

Según el veterinario Dominic Mijele, la jirafa es el animal más difícil de transportar debido a su altura, sensibilidad a la anestesia y riesgo de caídas fatales.

Desafío ambiental y poblacional en Kenia

Por eso, los guardabosques deben inmovilizarlas, vendar sus ojos y trasladarlas rápidamente a la reserva Oserengoni, donde un veterinario las vigila hasta que se adaptan.

La presión humana sigue aumentando. La población de Kenia pasó de 30 a más de 56 millones entre 2000 y 2024, ocupando zonas que antes funcionaban como refugio para la fauna.

Expertos advierten que la región de Naivasha está saturada y que las reubicaciones, cada vez más frecuentes y costosas, evidencian la urgencia de conciliar conservación, desarrollo y bienestar humano.