El secuestro masivo de 315 personas en una escuela católica de Nigeria ha generado una ola de condenas internacionales, incluida la del Papa León XIV, quien pidió su liberación inmediata durante el rezo del Ángelus.
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Nigeria vive uno de sus mayores secuestros recientes
El pontífice lamentó “con inmensa tristeza” la noticia del rapto de sacerdotes, estudiantes y docentes.
En uno de los episodios más graves registrados recientemente en el país africano.
De acuerdo con la Asociación Cristiana de Nigeria (CAN), hombres armados irrumpieron el viernes en la escuela St. Mary’s, en el oeste del país, y se llevaron a 315 personas entre alumnos y profesores.
El ataque ocurrió apenas días después de otro secuestro en un liceo del estado de Kebbi, donde 25 jóvenes fueron raptadas, lo que refuerza la preocupación por el incremento de la violencia en la región.
El Papa León XIV expresó su “profunda tristeza”, especialmente por la situación de los jóvenes retenidos y el sufrimiento de sus familias.
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La violencia reaviva heridas del pasado
Además, pidió rezar para que templos y centros educativos sigan siendo espacios de protección y esperanza.
Los secuestros masivos continúan marcando a Nigeria desde el rapto de casi 300 niñas en Chibok en 2014, perpetrado por el grupo yihadista Boko Haram.
Finalmente, una década después, muchas de aquellas menores aún permanecen desaparecidas, recordando la magnitud de la crisis de seguridad que atraviesa el país.