México.- Rosario Robles continuará presa en el Penal Femenil de Santa Martha.

El juez federal Felipe de Jesús Delgadillo Padierna resolvió que la prisión preventiva justificada es la medida más idónea y proporcional para garantizar la comparecencia de la ex funcionaria en el proceso, en virtud que su defensa ha sido "mentirosa" sobre su domicilio, sus ingresos y sus viajes, tres aspectos que en su opinión no acreditan su arraigo en la Ciudad de México.

"Ustedes vinieron aquí a mentir, de manera dolosa y falaz, a decir mentiras y a perjudicar a su defendida, el sistema penal tiene dientes y ustedes con su comportamiento falaz han activado esos dientes", dijo el juez durante la audiencia, en forma exaltada.

"Rosario Robles tiene un riesgo de sustracción alto y un comportamiento desleal".

Delgadillo, sobrino de la diputada federal morenista Dolores Padierna, afirmó que Robles ha mentido sobre su domicilio porque declaró que vive en Los Reyes, Coyoacán, y la Fiscalía General de la República presentó un oficio que establece que ella tramitó una licencia de conducir con una dirección en Polanco.

Otra de las "falsedades" que señaló el juez es que Robles manifestó no tener recursos económicos para evadirse de la justicia y, sin embargo, cuando ella se enteró que estaba citada ante la justicia, estaba en el extranjero y tuvo el dinero suficiente para cambiar su vuelo de regreso a México y presentarse a la audiencia de imputación.

La otra mentira que señaló Delgadillo es que Robles declaró que el 4 de agosto regresó de vacaciones de Costa Rica, para presentarse a la audiencia inicial, mientras que sus abogados manifestaron que ese viaje en realidad había sido para tomar un curso.

La agresividad del juez esta vez ocasionó que le interrumpieran tanto Robles como sus abogados, aunque desde un principio se les informó que no podían hacer uso de la palabra.

"Usted no puede venir a decirme aquí mentiroso, para eso está aquí el Ministerio Público, para que le dé vista (para que lo denuncie)", le interrumpió el litigante Julio Hernández Barros.

En ese momento pidió la palabra el Fiscal Manuel Granados Quirós, pero el juez, agresivo, le espetó "ya le he dicho que no debe de interrumpir cuando la otra parte está hablando".

Enseguida tomó la palabra Epigmenio Mendieta, otro de los abogados de Robles, quien le dijo sin rodeos al juez que había dejado de ser imparcial y que debía excusarse de seguir conduciendo este proceso.

"Usted ya ha dejado de ser imparcial, muestra una clara animadversión hacia la procesada, ha puesto a Rosario Robles como una enemiga y por eso no debería continuar, usted estaría obligado a excusarse del asunto. El ánimo tan ríspido no es propio de un juez, que quede constancia que usted ha faltado el respeto y ha patentizado la animadversión", expresó Mendieta.

La respuesta del juez fue que ya antes los abogados habían promovido un recurso legal para recusarlo del caso y no podían ahora hacerse cargo de esta nueva petición. Cabe decir que en agosto la defensa de la imputada pidió excusar a Delgadillo del caso y su recurso fue improcedente.

Al final de esta audiencia de 40 minutos, Rosario Robles tomó la palabra -sin que el juez la interrumpiera, pese a que no podía hacerlo- y lo primero que cuestionó fueron las mentiras de la FGR y la ética del juez, al haber ocultado su parentesco con Dolores Padierna.

"Jamás he mentido sobre mi domicilio, la prueba que usted señala (la licencia de conducir tramitada recientemente a su nombre) ha quedado acreditado que es falsa, porque ni siquiera el documento que entregó la Secretaría de Movilidad en copia certificada dice esa dirección. Quien ha mentido aquí es el Ministerio Público, aquí está mi licencia", dijo Robles, mostrando su licencia en la sala judicial.

"Y le quiero decir que, dadas sus relaciones familiares que existen, por ética las debió haber informado".

También precisó que no ganaba 200 mil pesos mensuales como titular de la Sedatu y la Sedesol, tal como le atribuyó la FGR, y que ella cubre los gastos de su defensa con la ayuda de amigos leales.

Al mismo tiempo, aclaró al juez que ella nunca dijo que estaba en Costa Rica, previo a comparecer por vez primera ante la justicia, sino que regresó de viaje vía ese país centroamericano.

"Quiero dejar claro que se violó mi presunción de inocencia, no es cierto que yo me quiera sustraer de acción de la justicia, esto se trata de una venganza política y no de un acto de justicia, su señoría", expuso.

En punto de las 17:39 horas, dos vehículos del Sistema Penitenciario de la Ciudad de México trasladaron de vuelta a Robles del Reclusorio Sur al Penal del Santa Martha Acatitla.

Su abogado Julio Hernández Barros anunció que en las próximas horas presentará un nuevo recurso de apelación contra la decisión tomada esta tarde por el juez Delgadillo.

Con información de Reforma

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