CDMX.- En esta temporada de fin de año, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha evitado el ingreso a México de 3 mil 865 pinos de Navidad con diversas plagas, que pretendían entrar por la aduana de Mexicali, Baja California, provenientes de Estados Unidos.
En total son tres cargamentos retornados de manera voluntaria, provenientes del estado de Oregón; un primer cargamento con dos mil 135 árboles, un segundo tráiler con mil 030 ejemplares, y un tercer tráiler con 700 unidades.
Desde el 5 de noviembre y hasta la primera semana de diciembre, la Profepa instrumenta el Programa de Verificación e Inspección a la Importación de árboles de Navidad para evitar un riesgo fitosanitario para los bosques mexicanos, por la posible introducción de plagas de importancia cuarentenaria, es decir, que no tiene registro en el país.
En la temporada 2017, la Profepa verificó 645 mil 937 pinos de Navidad en las inspectorías ubicadas en los estados de Baja California, Sonora, Tamaulipas y Nuevo León, de los cuales se regresaron 15 mil 621, equivalentes al 2.41 por ciento, al ser detectados insectos conocidos comúnmente como picudos, gorgojos, moscas agalleras, palomillas y avispas.
La inspección aleatoria se realiza en nueve puntos fronterizos del país, en las inspectorías de Baja California (Mexicali y Tijuana), Coahuila (Piedras Negras), Chihuahua (Zaragoza), Nuevo León (Colombia), Sonora (San Luis Río Colorado y Nogales) y Tamaulipas (Reynosa y Nuevo Laredo).
En esta temporada 2018, las plagas se detectaron en pinos de las especies Douglas fir (pseudotsuga mensienzii) y Abies Procera (Noble fir).
Como parte del procedimiento se tomaron muestras de los insectos y larvas, que fueron enviadas al Laboratorio Nacional de Referencia Forestal con que cuenta la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para determinar su peligrosidad.
“No obstante, los propietarios de los árboles dieron aviso a la Profepa de su decisión de retornar los árboles a Oregón, Estados Unidos”, dio a conocer en un comunicado de prensa.
Las revisiones incluyen embarques de madera tarimas, plantas e incluso muebles, para evitar que contengan insectos, larvas o cualquier otro organismo vivo que pudiera reproducirse en nuestros bosques creando desequilibrio en los ecosistemas o acarreando problemas fitosanitarios difíciles de combatir y controlar.