ALBERTO LATÍ
Resulta demasiado costoso traer de vuelta a la Liga Mx a los mexicanos que han decidido terminar su etapa europea.

Resulta demasiado costoso traer de vuelta a la Liga Mx a los mexicanos que han decidido terminar su etapa europea.

Quien lo pretenda no sólo deberá competir con el voluminoso sueldo que todavía podrían recibir en Europa, sino, incluso más difícil, con el ofrecido por ligas idóneas para jubilarse como la estadounidense Major League Soccer o varias del Golfo Pérsico.

Una misión que, con la excepción del retorno de Guillermo Ochoa al América, últimamente ha sido acaparada por los equipos regiomontanos. Javier Aquino, Diego Reyes y Carlos Salcedo en Tigres, Miguel Layún y ahora Héctor Moreno en Monterrey, por no mencionar a Javier Aguirre, tan determinado a no dirigir de nuevo en México hasta que Rayados lo convenció.

A nadie le duele más esa situación que al Guadalajara. El resto de los clubes de nuestro torneo pueden debatirse entre repatriar a un mundialista mexicano o fichar a un extranjero que aporte un nivel futbolístico similar. El Rebaño, no. Cerrado a elementos nacionales y a un mercado demasiado limitado, Chivas ha de asumir que la única posibilidad de dar una inmediata mejora a su plantel es firmando a esas estrellas cuando todavía tienen futbol en las piernas.

Es sencillo opinar a toro pasado. Sin embargo, año y medio después del gran desembolso en jugadores como Uriel Antuna, Jesús Angulo o Christian Calderón, parece evidente que habría costado menos y aportado más el regreso de alguno de los europeos tricolores.

Sin éxito ÔÇôya por no colmar las exigencias del crack, ya porque en ese momento no deseaban reincorporarse a la Liga MxÔÇô, pero se sabe que Chivas lo intentó. Hoy contempla con resignación cómo los de Monterrey le comen parte del mandado. La otra parte se la comen en la MLS con dos surgidos de la cantera rojiblanca (Carlos Vela y Javier Hernández) blindados por sus contratos en California.

Entonces giramos la mirada hacia Europa y analizamos, caso a caso, quién podría volver. Más allá de afinidades con el Guadalajara o inviabilidad por procedencia americanista, descartamos a los que están en el pináculo de su carrera como Héctor Herrera, Hirving Lozano, Tecatito Corona, Diego Lainez, Edson álvarez, incluso, con todo y su larga convalecencia, Raúl Jiménez. Luego está Andrés Guardado, orgulloso atlista y que tiende a una escala por la MLS antes de reasentarse en nuestro país. Tiempo atrás se buscó a Néstor Araujo quien lo ha hecho espléndidamente en el Celta de Vigo y cuenta con todas las opciones para seguir destacando en España. Lo mismo se especuló con Erik Gutiérrez, muy asediado por las lesiones y aún sin explotar futbolísticamente en Holanda. Como puede verse, las posibilidades son demasiado escasas.

Eso nos devuelve al planteamiento inicial: siendo tan pocos los futbolistas mexicanos que triunfan en Europa y desean ser repatriados, Chivas no puede permitirse que lo efectúen con otro uniforme.

Por caro que haya sido, por negativas que haya puesto, Héctor Moreno tenía que haber regresado al Guadalajara. Luego no fue posible.

 

Twitter/albertolati